MONTECARLO.- El colombiano Juan Pablo Montoya (Williams FW23 BMW) puede hacer historia este domingo en el Gran Premio de Mónaco de Fórmula Uno, al convertirse en el primer debutante en lograr la victoria, justo un año después de que lo hiciera en las famosas 500 millas de Indianápolis.
El británico Graham Hill logró en cinco ocasiones, entre los años 1963 y 1969, la victoria en el Gran Premio de Mónaco y fue el último debutante en vencer en las 500 millas de Indianápolis, al volante de un Lola Ford en 1966, hasta que el pasado año lo hizo Montoya, que ahora puede seguir sus pasos en el Principado.
El colombiano ya ha corrido en una ocasión en Mónaco, cuando competía en el Campeonato Internacional de Fórmula 3000 en 1998 y finalizó en sexta posición. Se clasificó en la tercera posición en la formación de salida, pero le quitaron su mejor tiempo por saltarse la variante de entrada al puerto y descendió hasta la octava posición.
En la carrera ascendió hasta el segundo lugar y entonces fue penalizado con una parada en boxes de diez segundos que le relegó hasta la décima plaza, desde donde tuvo que iniciar otra remontada, en el transcurso de la cual protagonizó un espectacular duelo con el uruguayo Gonzalo Rodríguez, que se impondría al año siguiente y fallecería pocos meses después en el circuito de Laguna Seca en los entrenamientos de una prueba del Campeonato CART.
Los adelantamientos son cada vez menos frecuentes en la Fórmula Uno, sin embargo Montoya ha sorprendido a todo el mundo con los suyos sobre el alemán Michael Schumacher, su secreto: "No hay secreto, si tienes una oportunidad para adelantar, tienes que aprovecharla", manifiesta con tranquilidad el colombiano, residente en Mónaco.
Después del último incidente con Michael Schumacher en el Gran Premio de Austria, en el que ambos terminaron fuera de la pista al retrasar al máximo una frenada para evitar que el alemán le arrebatara el primer puesto, una vez enfriados los ánimos, el campeón del mundo ha reconocido que Montoya se parece mucho a él cuando debutó.
"Es como yo cuando debuté", ha comentado Schumacher, "no me preocupaba de quién tenía delante, sólo me importaba el presente y ser competitivo. Era así y esta característica me ha ayudado a dar lo mejor de mi mismo". El piloto alemán añade que "en aquel tiempo muchos decían que me pasaba en mi comportamiento, así que ahora no puedo lamentarme".
En el circuito urbano de Montecarlo puede ocurrir de todo: el jueves Montoya terminó los entrenamientos contra los raíles de seguridad de "La Rascasse", pero este sábado luchará por conseguir un buen puesto en la formación y afrontará la carrera con un único objetivo, lograr la victoria, su primera victoria en Fórmula Uno, y convertirse en el primer debutante en hacerlo en Montecarlo.