PARIS.- Fernando González, presa absoluta de su irregularidad, se estaba despidiendo de Roland Garros demasiado temprano ante el francés Cyrill Saulnier. Dos sets a uno abajo, González caía 2-5 en el cuarto, producto de sus propios errores no forzados y de un titubeante primer servicio.
Sin embargo, desde ese momento el tenista chileno se sacudió de los fantasmas, ganó cinco juegos seguidos y, más encima, remató el partido por 2-6, 6-2, 1-6, 7-5 y 6-4 en tres horas y diez minutos de juego.
Saulnier casi duplicó los errores del chileno en los últimos dos sets, lo que unido al gran primer servicio de González, implicó que la tercera raqueta nacional avance en su debut a la segunda ronda del Abierto parasino, en donde se medirá con el español Jacobo Díaz (eliminado el año pasado en este torneo por Nicolás Massú) que venció por 3-6, 7-6(6), 6-1 y 6-1 al ruso Mikhail Youzhny.