SANTIAGO.- Sólo el protocolo, como él mismo lo dijo, logró sacar de su obsesiva preocupación por el duelo entre su equipo, Wanderers, y Palestino, el fin de semana por el torneo nacional. La obligación a la que se refiere el nuevo técnico de la selección, Jorge Garcés, era con cumplir ante la ANFP con las presentaciones oficiales, dos días antes de entregar la nómina de jugadores que enfrentarán a Brasil el 7 de octubre por las clasificatorias.
El protocolo, de hecho, no permitió confirmar de su boca lo que dijo una fuente al interior de la ANFP, que asegura que habrá ocho "extranjeros" en la primera lista de Garcés: Marcelo Salas, David Pizarro, Clarence Acuña, Pablo Galdames, Jorge Vargas, Reinaldo Navia, Rodrigo Valenzuela y un octavo que saldría de Ricardo Rojas, Pedro Reyes y Pablo Contreras.
El flamante entrenador no quiso hablar siquiera de planteamientos ("primero tengo que plasmárselos a mis jugadores"), pero reconoció que lo que busca con el equipo es que logren captar el estilo que quiere imprimirle.
"Mis motivaciones son que los elegidos jueguen convencidos del planteamiento, de lograr una buena relación con ellos. Desde ya, la recepción ha sido muy buena", dijo el director técnico.
Acompañado de los dirigentes Demetrio Marinakis y Efraín Palma -quienes se harán cargo de la comisión selección-, el entrenador negó que la duplicidad de funciones atente contra el rendimiento de los dos equipos.
"Sólo por protocolo me presento ante ustedes, porque mi cabeza está en el partido del domingo, en lo que haga Wanderers frente a Palestino. Por ejemplo, a los jugadores de la selección los elegí en una hora. Si alguien conoce el ambiente del fútbol, pero de verdad, le basta ese tiempo para armar la nómina", dijo.
Garcés probablemente designará a un técnico para que presencie en Montevideo el partido entre Uruguay y Colombia, futuro rival de la "Roja" en la penúltima fecha de las clasificatorias, tema que se dilucidará el domingo, día en que entregará la nómina con que enfrentará en Curitiba a Brasil.