MELBOURNE.- Los organizadores del Abierto de tenis de Australia revelaron este miércoles que hasta el 28 de enero, día en que finaliza la competición, se aplicarán una cien pruebas antidopaje, en las que no se incluye la de detección de eritropoyetina (EPO).
La gran novedad de este Abierto es que los criterios para los protocolos de las pruebas antidopaje responderán a los definidos por el Comité Olímpico Internacional (COI), sobre todo en lo que atañe a eventuales sanciones.