PARIS.- La selección francesa derrotó hoy con contundencia a Escocia (5-0) en un partido que sirvió a los pupilos de Roger Lemerre para engrasar los motores a dos meses del inicio del Mundial en el que se presentan como favoritos.
Las dudas que se habían instalado en el equipo francés en los últimos amistosos quedaron a un lado ante la contundencia de una victoria que ocultó la debilidad del rival. Mucho trabajo tiene por delante el alemán Berti Vogts para reconstruir un conjunto falto de carácter y de solidez.
Lemerre solventó la comentada baja de Robert Pires con un simple cambio de hombres, sin tocar para nada su dibujo táctico. Colocó a Henry en la banda izquierda, donde suele actuar Pires, con Trezeguet sólo en punta y Zinedine Zidane de enganche, con libertad de movimientos.
El partido comenzó con dudas para los "bleus", propiciadas por un fallo en el minuto uno de Barthez que a punto estuvo de convertirse en un susto y que trajo a la memoria de los espectadores de algunas de las desafortunadas intervenciones del guardameta del Manchester esta temporada.
Pero le bastaron diez minutos a los franceses para controlar la situación. Lo que tardó Zidane en agarrar una volea desde la medular del área e introducir el balón en las mallas escocesas.
Con más serenidad, Francia comenzó a desplegar su juego, con un Zidane participativo que estuvo con frecuencia por la banda derecha, la que suele ocupar el hoy lesionado Pires.
Sin apenas margen de maniobra, la defensa de cinco británica se vio desbordada por el juego francés, que utilizó las bandas y aprovechó la lentitud de los centrales rivales.
En el minuto 23, una incursión por la banda izquierda de Zidane permite a Lizarazu centrar al área donde la cabeza de Trezeguet envía el balón a las mallas.
Las facilidades que daba la defensa escocesa y la concentración de los hombres de Lemerre hicieron que se respirara la goleada.
Otra incursión por la banda, esta vez de Vieira y por el flanco derecho, permitió a Henry desde la medular del área y de espléndida volea marcar el tercer tanto, muy similar al de Zidane.
Y para seguir la media de un gol cada diez minutos, Trezeguet aprovechó otro pase de Vieira desde la derecha para controlar en el área y, de sutil toque, marcar el cuarto.
En la segunda parte, el esperado carrusel de cambios típico de un amistoso distorsionó la concentración de Francia pero permitió a Lemerre probar algunos de los hombres que pueden completar la lista del Mundial.
Cuando el juego agonizaba, Marlet, que había entrado en el segundo tiempo, aprovechó una jugada aislada para marcar de potente trallazo y reivindicar así un puesto en la lista de Lemerre.
FRANCIA: Barthez; Candela (Karembeu, m.56), Leboeuf (Christanval, m.64), Desailly (Silvestre, m.46), Lizarazu; Vieira (Makelele, m.46), Petit, Zidane (Djorkaeff, m.81), Wiltord (Marlet, m.56); Henry, Trezeguet (Carriere, m.74).
ESCOCIA: Sullivan; Weir, Crainey, Lambert, Dailly; Caldwell, Freedman (Gemmill, m.46), Matteo, Crawford; (Thompson, m.64) Cameron (Holt, m.46) (McManara, m.64), McCann.
Goles: 1-0, m.11: Zidane; 2-0, m.23: Trezeguet; 3-0, m.31: Henry; 4-0, m.42: Trezeguet; 5-0: Marlet, m.87.
Arbitro: Jacek Granat (POL), mostró tarjeta amarilla a Lizarazu.