MUIRFIELD.- El español Sergio García, de 22 años y que disputa su sexto Abierto Británico -cuarto como profesional-, mostró hoy en Muirfield sus respetos al máximo candidato al triunfo, el estadounidense Tiger Woods, pero precisó que éste no le intimida.
Woods y García mantuvieron un tenso cara a cara en la última jornada del Abierto estadounidense, que se decantó finalmente hacia el lado del jugador californiano "por culpa de los fallos con el putt", aseguró el castellonense.
"No me importaría repetir esa misma situación de Bethpage. Por supuesto que podría superar a Tiger. No tengo duda alguna, siempre que me salgan bien las cosas. Tiger me infunde respeto, pero no me intimida", comentó el golfista de Borriol en el campo donde ganara en 1998 el Abierto Británico para aficionados.
Sobre ese triunfo en Muirfield hace 4 años, García apuntó que "los recuerdos buenos siempre ayudan mentalmente", si bien precisó que el campo en el que ganó ha cambiado en algunos hoyos.
Según el castellonense, ahora Muirfield tiene el "rough" un poco más pegado a las calles, éstas son, por tanto, un poco más estrechas, dos "tees" han sido alargados (ambos de 3) y entra más en juego el "bunker" en calle del hoyo 12.
"Necesito coger confianza desde el primer día", aseguró García como idea básica para aspirar a un buen resultado. "En los días de práctica no he pegado mal a la bola, pero aún me falta mejorar con el ’putt’. Va a resultar fundamental pegar bien en las salidas", dijo García.
El de Borriol no podrá contar, una vez más, con su "caddie" habitual, Glen Murray, ni con el apoyo incondicional de la tenista suiza Martina Hingis, quien se entrena para recuperarse de su lesión en la rodilla.
El ayudante de García volverá a ser Anthony Knight, el mismo que lleva su bolsa de palos desde el Colonial (Texas) por una enfermedad viral que afecta al "caddie" titular.
