SANTIAGO.- El piloto chileno Oscar Perrot, al vencer hoy, retuvo el título de la Fórmula Espron y consiguió su tercer cetro en el automovilismo brasileño, uno de los más destacados e importantes del mundo.
La barra de cerca medio centenar de chilenos saltó y agitó la bandera chilena cuando el corredor nacido en Viña del Mar cruzó la meta para vencer en la undécima y penúltima fecha de la Fórmula Espron que lo consagraba nuevamente campeón y que lo llevaba a lo más alto del podio del autódromo de Interlagos, en Sao Paulo, el mismo que visitan anualmente las estrellas de la Fórmula Uno.
Perrot, ingeniero comercial de profesión, realizó una carrera impecable y consiguió su tercer triunfo de la temporada y de esa forma entró a la historia del automovilismo chileno al lograr su tercer título de campeón en Brasil, que es uno de los medios más importante y de jerarquía del automovilismo deportivo mundial.
El piloto chileno superó todos los contratiempos que tuvo en los días anteriores, incluyendo el inconveniente electrónico que lo postergó ayer al tercer lugar de la grilla de largada.
Hoy todo varió, porque desde la partida y tal como lo había planificado atacó a sus adversarios Luiz Mancuso y Fabio Silva, quienes lo habían superado en clasificaciones.
Al largarse y al entrar a la primea curva, luego de la recta principal, la S de Senna, ya había emparejado a sus dos rivales, pero prefirió en la curva siguiente postergar a Silva para cumplir el primer giro en el segundo lugar entre la veintena de participantes. El brasileño le devolvió la mano y lo superó en la segunda vuelta. En ese momento era un duelo bravo y no se escapaba el líder Mancuso. En la tercera vuelta al entrar a la curva de El Lago, al final de la recta opuesta del escenario paulista, aventajó nuevamente a Silva y se fue a la caza de Mancuso. Nuevamente en el lugar propicio, la frenada en al curva de El Lago, se convirtió en el líder de la carrera.
Desde ese momento trabajó tranquilo, con un accionar sin errores y tratando el auto bien. De esa forma consiguió despegarse de sus rivales y principalmente del dúo Mancuso - Silva, quienes luchaban por convertirse en escolta de chileno. Un duelo que significó perdida de tiempo y que facilitaron el trabajo del viñamarino, que en forma muy serena vio como desde boxes le indicaban el paso de las vueltas y la ventaja sobre el resto se mantenía.
La cuadriculada le sancionó una nueva victoria y que lo convierte el piloto chileno de mejor actuación a nivel internacional de esta temporada, considerando la jerarquía de su categoría y del medio en que interviene.
La barra chilena se adueñó del autódromo. El box 23 del autódromo paulista, el mismo que ocupa Jordan, se convirtió en sede de una gran fiesta y de llantos, que solamente se suspendió para acompañar al campeón al podio. Al volver aún emocionado y abrazado a su padre Mauricio y su hermana María José comentó "Me siento orgulloso de este nuevo título. El tercero consecutivo que le doy a mi país y al automovilismo chileno. No quiero pecar de falsa modestia, pero junto a Salazar somos los únicos pilotos que hemos sido campeones fuera del país. Le agradezco a mi padre, a Aldo Piedade el ingeniero del equipo y mis auspiciadores Mercomex y Mercocarga, que ahora me apoyarán para correr en Argentina y Brasil el 2003 y a la Federación de Automovilismo de Chile".
El resultado final fue el siguiente:
1) Oscar Perrot, Chile, 33.19.6
2) Luis Renato Mancuso, Brasil, a 7 segundos
3) Fabio Silva Pinheiro, Brasil, a 10 s.
4) Antonio Marcondes, Brasil a 15 s.
5) Claudio Ranieri, Brasil a 23 s.
6) Ruy Armelin, Brasil a 35 s.