BUENOS AIRES.- El búlgaro Veselin Topalov ya acaricia el título de campeón del Mundo de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) tras lograr tablas ante el segundo clasificado, el ruso Peter Svidler, en el Mundial de San Luis, centro de Argentina.
A falta de dos jornadas, el búlgaro radicado en Salamanca -oeste de España- aventaja en 1,5 punto a Svidler y al indio Viswanathan Anand, que comparten la segunda plaza, por lo que si en la jornada de este miércoles mantiene la distancia, se erigirá en el nuevo rey del ajedrez mundial.
El esperado choque de la semana, el duelo en el que Svidler debía poner toda la carne en el asador para tratar de recortar la ventaja de su oponente, apenas duró 21 movimientos.
Sobre el desarrollo de una apertura española cerrada, el búlgaro (blancas) llegó a una posición de presión sobre la defensa del ruso, quien al recibir la oferta de tablas y ver que el intercambio de piezas que estaban a punto de realizar lo dejaba en desventaja, no vaciló en tomar la mano de su adversario.
Además del propio Topalov, el gran ganador de la jornada fue Anand, no sólo porque fue el único jugador que saldó el día con victoria sino porque se ha encaramado de nuevo en el segundo puesto.
El indio (negras) jugó sólido ante el húngaro Peter Leko y logró que su adversario tirara el rey tras 53 movimientos desarrollados sobre Petrov, ataque clásico; pero, sobre todo, consiguió recuperar las opciones en el torneo que días atrás parecía haber perdido completamente.
En la partida más larga del día, casi cinco horas y media, el ruso Alezander Morozevich (blancas) y la húngara Judit Polgar concluyeron también con tablas después de que el ruso hubiese tenido una ligera ventaja que la única mujer del torneo supo cerrar de forma consistente.
El uzbeko Rustam Kasimdzhanov, ya resignado a la pérdida de la corona de la Federación Internacional de Ajedrez, no pasó de las tablas contra el inglés Michael Adams (negras) sobre un planteamiento de apertura española cerrada, variante Balla.
