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NBA: Sin Ginobili los Spurs igual ganan

Parker dominó el ataque y aportó 30 puntos, 20 de ellos en la segunda parte, incluidos dos tiros libres a doce segundos del final que significaron el triunfo final en la noche del jueves.

02 de Diciembre de 2005 | 08:10 | DPA


LOS ANGELES.- Tony Parker y Bruce Bowen fueron los líderes de los San Antonio Spurs que vencieron por 92-90 a Dallas Mavericks en el duelo más esperado en la conferencia oeste de la liga norteamericana de baloncesto (NBA).

Parker dominó el ataque y aportó 30 puntos, 20 de ellos en la segunda parte, incluidos dos tiros libres a doce segundos del final que significaron el triunfo final en la noche del jueves. Bowen, por su parte, fue el encargado de frenar al alemán Dirk Nowitzki, al que dejó en 14 puntos y nueve rebotes.

En los Spurs fue baja el argentino Manu Ginobili, con una torcedura de tobillo, y su puesto fue bien cubierto por Michael Finley, ex capitán de Dallas, que sumó 15 puntos.

"Fue un gran partido. Los dos equipos lucharon como era de esperar. Dos equipos agresivos, dos buenos equipos que quieren estar ahí al final de la temporada", resumió Gregg Popovich, entrenador de unos SPurs que llevan siete victorias en sus últimos ocho encuentros.

La alegría de San Antonio estuvo sin embargo a punto de acabar en derrota.

Parker puso el 92-88 para los Spurs que prácticamente sentenciaba el encuentro, pero Brent Barry cometió falta de 6,1 segundos sobre Marquis Daniels, que había intentado un desesperado triple.

Daniels anotó los dos primeros tiros libres, pero erró el tercero. Tim Duncan capturó el último de sus 14 rebotes y el partido parecía sentenciado. Pero el astro de los Spurs cometió pasos, lo que dio el balón a Dallas con 3,5 segundos por jugarse.

Jason Terry sacó de su canasta y conectó con Nowitzki, que estaba en la esquina opuesta. El alemán capturó el balón y se levantó en unas décimas de segundo que hicieron contener la respiración a los 20.000 espectadores que se dieron cita en el American Airlines Center de Dallas.

Sin embargo, Bowen completó su excelso partido defensivo rozando el balón cuando salía de las manos del ídolo local. La pelota no llegó a tocar el aro cuando sonó la bocina final.

"Lo tenía bien encarado, pero hay que reconocerle el mérito a Bruce", reconoció Nowitzki. "Cada vez que tocaba la pelota un tipo grande se me echaba encima".
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