SANTIAGO.- El ex jugador chileno de Alianza Lima Fernando Martel agradeció el trato recibido en Perú por la hinchada de los "íntimos" y le deseó lo mejor a sus antiguos compañeros.
El futbolista, que en Alianza el entrenador Gerardo Pelusso lo hacía jugar como volante, llegó a Chile la semana pasada después de alzar la copa del título peruano, aparentemente sólo en plan de vacaciones.
Sin embargo, en la noche del martes fue presentado como nuevo refuerzo de Everton, lo que causó sorpresa en los dirigentes peruanos ya que estaba en los planes de Pelusso, especialmente para jugar la Copa Libertadores.
Sin embargo, se sabía que Martel deseaba estar en su país para manejar personalmente sus negocios en Santiago, que estaban siendo mal administrados. Además, hay razones familiares, ya que el jugador de 31 años planea casarse.
"Creo que la gente se había identificado con lo que había hecho, pero así es el fútbol. No había nada personal (en su desvinculación) y al final es así... Se impone la gente que amas. Por ahí, la prioridad es la familia y eso tiene que entenderse", comentó a dpa.
Agregó que Alianza es la "institución más grande del Perú y ojalá que en 2007 le vaya mejor que el año pasado. Y este año, que están en la Libertadores, ojalá puedan clasificar. Lo deseo de corazón, que ojalá consigan todos los títulos que ellos se van a proponer".
Finalmente expresó: "Nada más. Dar las gracias por haberme seguido, por haberme tratado tan bien".
Martel fue una de las piezas claves en el equipo que dirige el técnico Gerardo Pelusso y tuvo el raro honor de recibir los mismos cánticos desde la gradería que escuchaba Marcelo Salas en River Plate: "Chileeeeeno, chileeeeeno", lo que lo llenaba de orgullo.
Los medios peruanos han considerado que Martel fue clave en la campaña del club y que los dirigentes le hicieron una tentadora oferta para mantenerlo en el plantel campeón.
Sin embargo, a Martel le pareció mejor quedarse en su país, aunque fuera en un club que no jugará torneos internacionales, aunque con interesantes refuerzos y un nuevo entrenador, el ex seleccionador chileno Juvenal Olmos, que quiere ganarlo todo.
También se sabía que Martel no estaba cómodo en el puesto de mediocampista y quería volver a ser un delantero neto.
