MELBOURNE.- Con Michael Phelps a la cabeza, Estados Unidos rompió hoy tres récords mundiales y se dio un festín dorado -cuatro oros- en el mundial de natación. Italia también impuso una plusmarca.
Phelps tocó la meta, se giró para mirar el marcador, sacó el puño del agua en señal de victoria y justo en ese momento llegó el segundo.
El estadounidense trituró la plusmarca de los 200 metros estilo libre y obtuvo su segundo metal dorado en la justa. Y lo hizo parecer fácil.
Firme y decidido, la estrella de Baltimore surcó las aguas de la pileta Susie O’Neill dejando a sus rivales más y más rezagados con cada brazada que daba. Su tiempo de 1 minuto, 43.86 segundos acabó con la marca que ostentaba el australiano Ian Thorpe (1:44.06) desde el mundial de Fukuoka en 2001.
A su lado, sus principales rivales parecieron novatos. El holandés Pieter van den Hoogenband, que partía como favorito, llegó a 2,42 segundos para hacerse con la plata y el surcoreano Park Tae Hwan a 2,87 obtuvo el bronce.
"Quería ganar y sabía que la clave era ir a por todas en los primeros 100" , dijo el de Baltimore.
Con dos metales dorados en la bolsa, Phelps aún tiene seis pruebas por delante para lograr un pleno de ocho oros. Nadie lo ha logrado hasta el momento.
Para Estados Unidos fue una jornada histórica, ya que minutos después de la hazaña de Phelps, Natalie Coughlin se alzaba con el oro en los 100m espalda batiendo su récord mundial.
Coughlin marcó 59,44 segundos en el cronómetro, 14 centésimas menos que el que impuso en Fort Lauderdale en agosto de 2002. La plata le cayó a la francesa Laure Manaudou (59.87) y el bronce a la japonesa Reiko Nakamura (1:00.40).
"Me sentí muy fuerte y con confianza. Sabía que necesitaba nadar así para romper el récord. Y lo hice", dijo Coughlin.
Como si no fuera suficiente, el rey de la espalda, Aaron Peirsol, no quiso perderse la fiesta de su país.
Con una marca de 52.98 segundos rompió su récord mundial de 53.17 en los 100 metros espalda. El oro de Peirsol estuvo secundado con la plata de su compatriota Ryan Lochte (53.50). El bronce recayó en el británico Liam Tancock (53.71).
"Creo que este es el equipo más impresionante en el que he estado", dijo Peirsol. "Michael estuvo increible, Natalie lo hizo bien. Así que yo tenía que hacer algo".
Y ahí no acabó todo. En los 1500m libre, Kate Ziegler ganó la dorada con un tiempo de 15:53. 05. La suiza Flavia Rigamonti (15:55.38) fue plata y la japonesa Ai Shibata (15:58.55) bronce.
Transcurridas 10 fechas, Rusia lidera el casillero con 19 medallas (11-4-4), le sigue China con 14 (9-4-4) y completa el podio Estados Unidos con 15 (7-5-3). La justa concluye el domingo.
La exhibición de fuerza de los norteamericanos opacó la plusmarca mundial que impuso la italiana Federica Pellegrini en la semifinal de los 200m libre, de 1:56, 47. La marca anterior la ostentaba la alemana Franziska van Almsick (1:56.64) desde agosto de 2002.
Australia obtuvo un oro en los 100m pecho femeninos. Con 1:05 , 72, Leisel Jones batió el récord de campeonato. La estadounidense Jessica Hardy fue plata y la ucraniana Anna Khlistunova bronce.
El duelo Phelps-Van den Hoogenband era uno de los más ansiados en Melbourne , ya que reeditaba los 200m libre de las olimpiadas del 2004 en los que se vieron las caras los dos nadadores más Thorpe. En esa ocasión, el australiano fue oro, Hoogie plata y Phelps bronce.
Empero, Phelps entraba a la carrera defendiendo el título de Montreal 2005, donde no estuvieron ni el holandés (lesión) ni el australiano (descanso). Thorpe se retiró el año pasado por falta de motivación y una serie de lesiones.
"Quería que Thorpe estuviera aquí, Estoy un poco decepcionado, pero pude llegar aquí y nadar contra uno de los mejores, Peter", dijo Phelps.
Peirsol, que no tuvo una actuación sobresaliente en la preliminar de los 100m espalda, dejó claro que es invencible.
Con su victoria se convierte en el único nadador que ha ganado los 100m espalda en tres ocasiones y en los últimos tres mundiales. En total suma seis medallas de oro en estas justas.