RÍO DE JANEIRO.- El gobierno brasileño recibió con sorpresa las exigencias presentadas por la FIFA para designar al país sudamericano como sede del Mundial de fútbol de 2014, pero pese a ello el presidente Luiz Inacio Lula da Silva no retirará su apoyo a la candidatura, reveló hoy el diario O Globo.
Según el rotativo, las exigencias de la FIFA incluyen la de eximir del pago de todo tipo de impuestos a todos los extranjeros involucrados en la realización del Mundial, desde los dirigentes de las entidades afiliadas hasta los equipos, los árbitros y las empresas de comunicación.
En declaraciones al rotativo, el coordinador jurídico de la candidatura brasileña a sede del Mundial de 2014, el abogado Francisco Mussnich, admitió que esa condición es una de las más "complicadas", así como las medidas demandadas por la FIFA para frenar el uso ilegal de imágenes de propiedad de la entidad y de los patrocinadores oficiales.
O Globo afirmó que las exigencias causaron "sorpresa" entre los asesores de ministros que comandan el área económica del gobierno, pero no impedirán que el presidente Lula ratifique en breve, en una declaración pública, su apoyo a la candidatura brasileña.
En declaraciones al diario, el ministro de Deportes, Orlando Silva, admitió que el Ministerio de Hacienda "está muy sensible" a la exigencia de eximir de impuestos a los extranjeros, pero aseguró que eso no será un obstáculo.
"El presidente Lula tiene interés en que el Mundial se realice aquí y su determinación se reflejará en el área económica", aseveró.