NUEVA YORK.- Floyd Mayweather Jr. se está tomado unas vacaciones y parece que los planes de retiro pueden esperar. Antes de su victoria en 12 asaltos el sábado por decisión dividida sobre Oscar de la Hoya, Mayweather dijo que después del combate colgaría los guantes definitivamente, pero en una conferencia de prensa posterior a la pelea se mostró evasivo sobre el tema. Hoy afirmó ante reporteros en Nueva York que está esperando a que De la Hoya pida la revancha.
"Tuvimos un buen combate", manifestó Mayweather, al tiempo que mordía un emparedado en la sede de la televisora HBO. "Creo que una segunda pelea sería incluso mejor, porque podemos pelear en una confrontación directa. Y realmente ya no me queda nada por demostrar en este deporte", agregó.
Eso no es del todo cierto. El "Pretty Boy" quiere promover su propia firma promotora y otro jugoso cheque no le haría daño. Mayweather dijo que ganó entre 25 y 30 millones de dólares en el combate, que atrajo un récord de 2,15 millones de compras de pago por evento en la televisora que lo transmitió en Estados Unidos.
A De la Hoya también le serviría una revancha, para su empresa Golden Boy Promotions y para su propio legado. El púgil de 34 años ha perdido tres de sus últimas cinco peleas, y Mayweather no cree De la Hoya esté dispuesto a retirarse con una derrota al final de su carrera.
"Si quiere hablar sobre una segunda parte, puede llamarme", dijo Mayweather. "Yo digo que hay algo de orgullo involucrado. Si le dice a todos ustedes que no regresará para volver a pelear, regresará y peleará de nuevo conmigo. Así es", añadió.
Ross Greenburg, director de deportes de HBO, ciertamente no cree que Mayweather se vaya a retirar ahora. No después de que se vendieron las 16.200 entradas a la MGM Grand Garden Arena y ello generó 19 millones de dólares de ganancias en taquilla, también un récord.
"Las cosas apenas comienzan para él. Creo que nos está haciendo una broma", dijo Greenburg, un día después de que anunció que el pleito entre De La Hoya y Mayweather fue el de mayores ingresos en la historia del boxeo, con 120 millones de dólares en ganancias del pago por evento. "Uno no suele estar en la cúspide de sus mejores años como él está, en la vida y en el cuadrilátero, e irse cinco años de vacaciones. Se aburriría".
Si De la Hoya no quiere una revancha, Greenburg mencionó una lista de otros peleadores que pudieran querer probar suerte frente a Mayweather: un Shane Mosley que ya no está en sus años mozos; el mexicano Antonio Margarito, campeón de la OMB; el invicto puertorriqueño Miguel Cotto, que defenderá su título de welter de la AMB frente a Zab Judah el 9 de junio; y el también boricua Félix Trinidad.
"Tiene abundantes rivales", dijo Greenburg. "Sólo cuéntelos". Trinidad ofrece la opción más intrigante. De La Hoya ha dicho que le gustaría una revancha con Trinidad, quien le quitó el invicto al ganarle por decisión dividida en 1999. Pero Mayweather se interesó tras enterarse que Trinidad ha dicho que quiere pelear en la división de los medianos.
Trinidad, ex monarca en los pesos welter, junior mediano y mediano, se retiró tras vencer a Winky Wright en el 2005. Lo que tiene Trinidad es que su nombre es conocido y ello implica una bolsa más grande para Mayweather. "Hay que pensar en el negocio", dijo Mayweather. "Nadie conoce a Margarito. No atrar a nadie, y no puedo estar peleando con gente así", añadió.