Luego de victoria, el equipo de Manuel Pellegrini ya está en zona UEFA
EFE
ESPAÑA.- El Villarreal sigue en racha, al igual que su goleador Diego Forlán, que con sus dos tantos fue decisivo en la victoria por 3-1 ante el Athletic de Bilbao, un resultado que deja a los dirigidos de Manuel Pellegrini en puestos europeos.
El triunfo del Villarreal eleva ya a siete sus victorias consecutivas, un logro inconcebible hace apenas dos meses, pero que de la mano de la sociedad formada entre Robert Pires y Forlán han llevado a los de Pellegrini muy cerca de conseguir una plaza para la copa UEFA, una misión que hasta hace poco era casi imposible.
Mucho se jugaban los dos equipos y ambos saltaron con precauciones al terreno de juego. Los locales propusieron un fútbol de toque frente a un Athletic muy retrasado y que buscaba la verticalidad de sus delanteros.
El Athletic que no llegaba con mucha fluidez se encontró un "regalo" en una jugada en la que la zaga local dejó solo a Iraola y reclamó fuera de juego, pero el capitán vasco no desaprovechó la ocasión y anotó el 0-1.
El gol dio alas al Athletic que empezó a llegar con más peligro al área del Villarreal. Etxeberría tuvo el segundo gol a la media hora, en un garrafal error de los centrales del Villarreal, pero su lanzamiento salió muy cerca del poste.
Sin embargo, la alegría de los vascos la cortó de raíz la dupla formada por Pires y Forlán que en apenas dos minutos sacaron el máximo jugo a su sociedad para dar vuelta el marcador, luego de que este último empatara el encuentro tras un lanzamiento penal.
El Athletic acusó anímicamente el gol y apenas un minuto después nuevamente Forlán anotó el 2-1 que significó su decimonoveno gol esta temporada.
El chileno Matías Fernández ingresó a los 75' por el argentino Guillermo Franco, situación que permitió que el equipo comenzara a tener el balón en la mitad de cancha.
En la reanudación, el Athletic salió con más ambición al terreno de juego, pero todas su prerrogativas se vinieron abajo en apenas cinco minutos, cuando Ustaritz al tratar de evitar que rematara Guillermo Franco cabeceó y su despeje acabó dentro de su propia portería.