SANTIAGO.- Desde que Daniel Passarella dejó la banca de River, la directiva del equipo bonaerense ha pensado en un solo nombre: Ramón Díaz, que también es pretendido para seguir en San Lorenzo.
Y ya sabe qué refuerzos quiere el DT. Más allá de algunos apellidos que ya deslizó, la primera condición tiene dos nombres y un apellido: Emiliano y Michael Díaz, sus hijos.
Ya se reunió con dirigentes de River. Hubo muchas aristas en la charla de casi tres horas que terminó de acordarse luego de que el riojano comandara la práctica de San Lorenzo. Pasado el mediodía hubo otro llamado —el primero fue el lunes, tal como Olé publicó— y el DT prefirió ser local. Desde la renuncia de Passarella, el Pelado supo que podría tener la chance de regresar, a cinco años y medio de que le cerraran la puerta en la cara.
Esa es la gran razón por la cual se sentó a negociar y sólo pidió tiempo para resolver su salida de San Lorenzo. Así, todo se encamina hacia su vuelta a Núñez. De hecho, anoche el técnico cenó con Rafael Savino, quien ya está resignado a perderlo y sólo le preocupa encontrar la manera de que esto no lo perjudique en las elecciones.
La conversación con los regentes derivó en un análisis del plantel, síntoma inequívoco de que le dirá sí a la propuesta. "River es lo más grande, claro que me interesa. Dejame acomodarme para salir bien de San Lorenzo", comentó el Pelado en la reunión. Y luego de aceptar la condición de "perfil bajo en lo político" que le impusieron los dos dirigentes más importantes de Núñez, se metió en lo futbolístico.
"Faltan zurdos", fue uno de los detalles que marcó justamente un zurdo y habló maravillas de Osmar Ferreyra, su volante izquierdo fetiche, cuyo préstamo vence en diciembre.
Por su cabeza también merodeó D''Alessandro, uno de los nombres que tenía pensado pedirle a Savino. Su catarata de elogios derivó en Andrés Silvera y ahí Aguilar le puso un freno. "¿Vos querés que nos maten en San Lorenzo? ¿Encima de lo tuyo pretendés que le pidamos un jugador?", le preguntó y Ramón mostró su pícara sonrisa. Sus pretensiones también incluyeron al Lobo Ledesma, hoy en Grecia, y, por supuesto, a Emiliano y Michael, publicó el diario Olé.