Para Riquelme, Villarreal ya quedó atrás.
Agencias
VILLARREAL.- El presidente del Villarreal, Fernando Roig, habló hoy por última vez del caso Riquelme. De aquí en adelante, dijo no se referirá más al tema.
En conferencia de prensa el regente explicó detalles de la salida del argentino y reiteró que las malas relaciones entre el jugador y el club surgieron después de que el técnico chileno Manuel Pellegrini decidiera acortar las vacaciones de Navidad del año pasado y hacer que los jugadores se incorporaran al trabajo el día 29 de diciembre, en vez del 2 ó 3 de enero.
"Parece que eso no se aceptó y se jugó el partido contra Osasuna con este conflicto que el presidente desconocía. A partir de ese momento hubo un principio de falta de disciplina y Riquelme pensó que podía estar por encima del Villarreal y como digo siempre por encima del club no hay nadie", relató.
Cuestionado por si se había sentido decepcionado con Riquelme, el presidente del Villarreal recordó que han tenido "momentos buenos y malos" y que era "lógico" que al final no hubiera una buena relación. "Ya no es momento de volver a eso. Las cosas se complicaron pero todo ha terminado bien y vamos a pasar página", apuntó.
Aseguró además que su club "no había ganado ni un sólo euro" con la operación del traspaso del centrocampista argentino al Boca Juniors y lamentó que hubo momentos en los que estuvieron cerca de una solución pero el jugador no se mostró dispuesto a dialogar.
"Voy a hablar esta vez y no lo voy a hacer nunca más sobre este asunto", sentenció Roig, que apuntó que lo único que iba a decir sobre las cifras de la operación era que "el Villarreal no ha cobrado ni un sólo euro de traspaso".
El máximo responsable del club villarrealense admitió que lo único que le había molestado de toda la historia con Riquelme era que pudo haberse llegado a una solución antes pero la actitud del jugador lo impidió.
"Hubo momentos en el que parecía que podíamos solucionarlo pero no hubo ni voluntad de querer arreglarlo, ni voluntad de dialogar por su parte y cuando hay alguien que no quiere hablar de ninguna manera, es imposible solucionar algo como esto y a partir de ahí se acabó", explicó.
"Me molestaba que había momentos en los que podíamos tener una solución y ha habido muchas dificultades, pero al final, se ha resuelto todo, las tres patas están claras, Boca, Villarreal y el jugador, así que vamos a dejarlo en que todo el mundo está contento y feliz y no me ha molestado nada", incidió.
Además, Roig se refirió a la deuda aducida por el centrocampista argentino y dijo desconocer a qué se refería. "El Villarreal no le debe nada a ningún jugador, todos están absolutamente al día", replicó.
Igualmente, el presidente del Villarreal admitió que Riquelme no se había despedido de él "ni de nadie del club" aunque quiso justificarlo: "es posible que haya tenido que salir muy rápido a Argentina porque había gente -los consejeros del club que negociaban su traspaso- que lo estaba esperando para volver a España".
"Hemos llegado a un acuerdo las tres partes y creo que mientras ha estado aquí no ha habido problemas, el equipo ha jugado bien, ha dado la cara, ha funcionado y ganado partido. No podemos decir que nos hemos quitado un peso de encima pero era algo que teníamos que solucionar y ahora estamos todos muy contentos", agregó.
Roig aseguró que este asunto le ha llevado a aprender que deben seguir trabajando "con seriedad y rectitud" y que en el club cada uno tiene que hacer su función.
"Todo el mundo sabe cuáles son sus obligaciones y limitaciones y cada uno tiene su papel y es algo que desde entonces remarcamos mucho. Creo que hay un buen ambiente y cada uno se dedica a su trabajo", incidió.
Además, el presidente del Villarreal, evitó valorar las críticas del ex jugador argentino Diego Armando Maradona hacia el club español por el asunto Riquelme y se limitó a decir: "lo respeto como grandísimo futbolista que ha sido pero como no lo conozco personalmente no voy a valorar lo que dice sobre nosotros".