LONDRES.- El equipo campeón de la Fórmula Uno, Ferrari, dijo que está preparado para cerrar el caso de espionaje de McLaren en el ámbito deportivo, aunque continuará sus acciones legales contra las personas involucradas.
"Ferrari respeta la propuesta del presidente de la FIA de cancelar la asamblea general extraordinaria del Consejo Mundial (...) llevando de esta manera este incidente a un cierre desde un punto de vista deportivo", dijo la escudería en un comunicado.
"Sin embargo, se confirmó que las acciones penales que están en proceso en Italia y las civiles en Inglaterra aún continúan", agregó la casa de Maranello.
McLaren se disculpó el jueves con su rival italiano, la Federación Internacional del Automóvil (FIA) y los hinchas, luego de admitir que la información de Ferrari que llegó al equipo a comienzos del año fue mucho más allá de lo que se sospechaba.
También propuso congelar el desarrollo de tres sistemas que pensaba incorporar a sus autos 2008, luego de sospechas de la entidad rectora de la categoría, la FIA, de que podían estar vinculados a los datos sustraídos a Ferrari.
El presidente de la FIA, Max Mosley, propuso a cambio la cancelación de la reunión del 14 de febrero para evaluar el auto 2008 de McLaren, lo que podría desembocar en sanciones adicionales para la escudería un mes antes del comienzo de la nueva temporada.
La decisión debería permitir a la Fórmula Uno comenzar el Año Nuevo desde una foja cero y sin la amenaza de daño adicional por una controversia que pende sobre el deporte desde julio.
McLaren fue multado con 100 millones de dólares y despojado de todos sus puntos del Campeonato de Constructores como resultado de un escándalo que salió a la luz cuando se encontró en la casa del ex diseñador en jefe Mike Coughlan un expediente de 780 páginas sobre información de Ferrari.
Ferrari tomó acción legal contra Coughlan y su esposa Trudy, quien había fotocopiado los documentos, en Gran Bretaña en tanto inició en Italia procedimientos penales contra el ex empleado Nigel Stepney.
Stepney fue acusado de intento de sabotaje y de pasar secretos a McLaren. Varios empleados de McLaren también fueron advertidos en septiembre que se hallaban bajo investigación.