SANTIAGO.- Hace dos semanas, la triatleta Bárbara Riveros acusó una fuerte contractura en la zona superior de su rodilla derecha.
Aunque eso no le impidió competir la semana pasada en la Copa Mundial en Moolooba (fue 16ª), antes de su incursión esta madrugada en la Copa Continental de Oceanía en Plymouth, su fisiatra fue claro: para no arriesgar una lesión mayor y permitir una buena recuperación, no debía correr.
Sin embargo, como la Unión Internacional de Triatlón exige que cualquier renuncia a participar en una Copa debe hacerse con 30 días de anticipación, contra lo cual el deportista se arriesga a la suspensión de la próxima fecha mundialista en que esté inscrito, Riveros optó por largar y hacer sólo la natación, para no quedar fuera de su próxima prueba: la primera estación de la debutante World Championship Series, el 3 da mayo, en Corea.
En la incursión acuática, a diferencia de lo que ocurría hasta el año pasado en las grandes competiciones, la chilena logró salir en el primer grupo del agua, con una excelente performance de 21.40 minutos para los 1.500 metros. Fue el quinto mejor tiempo de la fase.
"Tenía algo de pena antes de largar porque sabía que no terminaría la carrera debido a las instrucciones de mi fisiatra. Tuve un poco de rabia porque este circuito era montañoso y eso a mí me acomoda mucho. Pero tenía que cuidarme", explicó Riveros.
La prueba en Plymouth la ganó la canadiense Sweetland con 2hr.02,21, seguida de la local Nicky Samuels con 2hr.03,50 y de la japonesa Kiyomi Niwata, con 2hr.04,37.