HAMBURGO.- La chilena Bárbara Riveros, que hoy sorprendió al acabar quinta en la prueba del Mundial de triatlón -el deporte olímpico que une la natación con el ciclismo y la carrera a pie- disputada en la localidad alemana de Hamburgo, dijo que su meta "es estar entre las diez mejores del mundo y, si se puede, mucho mejor".
"Mi intención era intentar acabar entre las primeras diez, pero estuvo muy difícil, sobre todo en la bicicleta, que fue muy peligrosa, debido a la lluvia. Era fácil caerse y había que estar a la defensiva", explicó la triatleta chilena.
"Gracias a Dios, pude aguantar en el grupo que se armó y estoy muy contenta de estar ahí y cada vez ir mejorando un pasito más", declaró Riveros, nacida hace veintidós años en Santiago.
"Es muy emocionante estar quinta en una competición de este nivel. Es algo realmente muy lindo", explicó la chilena, que vive en Wollongong, a unos ochenta kilómetros de Sydney, y que el pasado fin de semana acabó tercera en la prueba del Grand Prix europeo disputado en Tourangeaux (Francia).
"Después del 2007 quería clasificarme para los Juegos Olímpicos, algo que era muy difícil. Por eso tomé la decisión de congelar mis estudios en Chile y dedicarme al cien por ciento al triatlón. Después de clasificarme para los Juegos me di cuenta que cuando uno alcanza un nivel olímpico hay que tomar decisiones fuertes para dedicarse de forma profesional al triatlón", explicó.
"Por eso decidí quedarme en Australia durante todo el ciclo olímpico, porque mi entrenador es de allá", apuntó.
"Mi meta deportiva es estar entre las diez mejores del mundo y, si se puede, mucho mejor. Pero queda mucho camino por recorrer. El triatlón ha evolucionado mucho y todo es muy duro", explicó Riveros, que competirá en la prueba del Mundial de Londres y antes de hacerlo en el cierre de Gold Coast, disputará una competición en París con su club.