PARÍS.- La tenista francesa Amélie Mauresmo, de 30 años, anunció este jueves su retirada del circuito profesional, poniendo fin a su carrera, en la que ganó dos torneos del Grand Slam, el abierto de Australia, en Melbourne, y el torneo de Wimbledon, en 2006.
"Si les he reunido, es para anunciarles que pongo fin a mi carrera. Es algo emotivo. Una decisión que he pensado", declaró una emocionada Mauresmo en una conferencia de prensa en la que acabó llorando y que se desarrolló en Issy-les-Moulineaux, localidad situada a las puertas de París.
Mauresmo fue la primera tenista gala que ocupó el número uno del ránking de la WTA. En su carrera, además de ganar los títulos de los torneos de Grand Slam de Australia y de Wimbledon, la jugadora se hizo, entre otros méritos, con la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas de 2004.
El pasado mes de octubre, Mauresmo anunció que no competiría más en la temporada 2009, instalando las dudas sobre si volvería a jugar en un circuito en el que, según dijo, ya no tenía ganas de participar.
Su última aparación en las pistas de tenis data del pasado 2 de septiembre, fecha en la que salió derrotada ante la canadiense, número 39 del mundo, Aleksandra Wozniak en dos sets, por 6-4 y 6-0, en partido de segunda ronda del abierto de Estados Unidos.
Mauresmo, que se retira con el mejor palmarés del tenis francés, incluyendo el tenis masculino, ganó un total de 25 títulos en el circuito WTA desde que comenzara a jugar en 1993.
En mayo de 1995 disputó, con 16 años, su primer Roland Garros gracias a la invitación que le ofrecieron los organizadores del certamen. En el torneo de París, la tenista sólo registró, como mejores resultados, su clasificación para los cuartos de final durante dos años consecutivos, en 2003 y 2004.
Tuvo que esperar 13 años como profesional para lograr imponerse en un torneo del Grand Slam. Lo hizo por partida doble en 2006, en Australia y en Wimbledon, siete años después de haber disputado la final de un torneo de los 'grandes', pues en 1999 llegó a la final del abierto australiano.
En total, Mauresmo se embolsó algo más de 15 millones de dólares (casi 10 millones de euros) gracias a su rendimiento deportivo. Como tenista individual, ganó un total de 545 partidos y perdió 227.