Jhonny Herrera: Difícil tarde la del arquero de la U. Intervino bastante poco: en ambos goles de la UC no le dio ni para tocar la pelota por lo esquinado de los remates. Más allá de un par de centros bien cortados, sacó un tiro con las piernas que llevaba algo de peligro. No fue protagonista.
Juan Abarca: Regular lo del ex Huachipato. Estuvo bien en las coberturas, fue arriba cuando hubo que ir. En su contra juega que hizo un par de faltas cerca del área que le pudieron costar un gol a los azules.
José Rojas: El capitán de la U estuvo en lo suyo: no se complica. Cuando hay que reventar lo hace, cuando hay que sacarla al lateral no tiene vergüenza en hacerlo. Finalmente Rojas se las arregla para no desteñir en su puesto. Roberto Gutiérrez soñará con él.
Albert Acevedo: Al ex central de O’Higgins le correspondía la marca de Felipe Gutiérrez en el primer gol de los cruzados. Pestañeó un segundo y el joven volante se echó atrás e impactó solo de volea. Sacando ese “pequeño” detalle, Acevedo cumplió en la ordenada línea de tres de Jorge Sampaoli.
Felipe Seymour: Es el pulmón de la U. Es él quien hace el mayor desgaste en el mediocampo y lo hace bien. Aguanta los noventa minutos recuperando y entregando con bastante criterio. Igual, a diferencia de otros partidos no influyó tanto en la construcción y, eso, fue por la gran actuación de Felipe Gutiérrez.
Charles Aránguiz: No rindió como lo venía haciendo el ex Cobreloa. Trepó muy pocas veces por la derecha, por donde chocó constantemente con Juan Eluchans. Fue ese su mayor mérito, frenar al lateral de la UC. Pero con eso no basta, porque Marino debió llevarse todo el peso de generar fútbol.
Eugenio Mena: Hasta que Francisco Pizarro estuvo en cancha la tarea de Eugenio Mena fue poco notoria. No tenía mucho espacio para el ida y vuelta que tanto le gusta. El ingreso de Fernando Meneses le dio más libertad. Ahí logró complicar por la izquierda, pero el físico, a esa altura, no lo acompañaba tanto.
Guillermo Marino: El argentino demostró esta tarde en el Nacional que tiene nivel para ser el conductor de la U. La pidió, generó espacios, metió pases profundos, remató al arco y asistió en los dos goles a Eduardo Vargas. En el segundo tiempo le pasó la cuenta el poco apoyo que tuvo de sus compañeros para crear juego y salió reemplazado exhausto.
Edson Puch: Muy bajo el partido del iquiqueño. Quizás su cabeza ya está pensando en Emiratos Árabes, porque realmente no le salió ninguna. Cuando intentó encarar le faltó chispa para sacarse a su marca. Tampoco probó de distancia ni se recogió para aportar en la creación.
Eduardo Vargas: Parecía la noche soñada para el ex Cobreloa. En dos minutos ya había obligado a Toselli a lucirse y tras cartón anotó el primero de sus dos goles de cabeza. Y no se conformó con eso: tuvo un remate que se estrelló en el vertical que pudo sentenciar el partido. Todo eso hasta el primer tiempo, porque en el complemento se encerró en su banda y de ahí no salió más.
Gustavo Canales: A un delantero se le pide que eche adentro las oportunidades que tiene; Canales tuvo dos y ambas fueron atajadas por Toselli. Eso fue todo lo del argentino, que le costó mucho recibir de espaldas y girar. Flojo.
Marcelo Díaz: Tuvo media hora para intentar ayudar a Seymour a recuperar el mediocampo. No lo logró. A esa altura Católica se las arreglaba para manejar la pelota. A su favor, las ganas: probó dos veces desde fuera del área. No tuvo éxito.
Diego Rivarola: No pudo ser el héroe como contra Colo Colo. Tuvo una buena chance que fue sacada por Toselli. No le llegó mucho más la pelota.
Matías Pérez: Entró en reemplazo de Marino y realmente, en los casi diez minutos que jugó no apareció.