ESTAMBUL.- Sólo mujeres y niños menores de 12 años pudieron asistir en directo al partido de la Superliga turca que el Fenerbahce jugó en casa el martes ante el Manisaspor.
La Federación Turca de Fútbol (TFF) tomó así una medida novedosa para combatir la violencia y los disturbios. "Los tiempos de los partidos a puerta vacía ya son pasado", escribió el diario turco de hoy "Aksam".
El Fenerbahce fue sancionado con dos partidos sin público por parte de la TFF porque los aficionados del equipo azul y amarillo irrumpieron en el estadio durante un partido amistoso en julio ante el equipo ucraniano del Shaktar Donetsk.
Pero luego modificó el castigo. "Los hombres tuvieron que quedarse fuera en esta ocasión", titula el portal "Internet Haber".
A pesar de todo, el estadio Skr Saracoglu estuvo lleno con 41.000 personas. El club repartió gratuitamente 27.000 entradas a sus aficionadas. "Revolución femenina en el Fenerbahce" o "Día mundial de la mujer del Fenerbahce", titulan hoy los diarios turcos.
A pesar del apoyo de mujeres y niños, el equipo local empató 1-1.
