La española Arantxa Sánchez Vicario, es ahora la capitana del equipo español de tenis femenino.
AgenciasSANTIAGO.- La ex tenista española y número uno de la categoría durante el año 1995, Arantxa Sánchez Vicario, revela en su libro de memorias, “Arantxa Vamo! Memorias de una lucha, una vida y una mujer”, que su familia la dejó en la ruina y que no mantiene relación alguna con ellos.
La ganadora de cuarto títulos Grand Slam, aseguró que durante su carrera, que duró 17 años, ganó 45 millones de euros (casi 60 millones de dólares), cifra de la que no disfrutó y perdió.
"Me han dejado sin nada, estoy endeudada con Hacienda y mis propiedades son muy inferiores a las que tiene por ejemplo mi hermano Javier, que a lo largo de su vida ha ganado mucho menos que yo", escribe en su libro.
Arantxa Sánchez Vicario tiene actualmente problemas fiscales en España, por haber fijado su residencia de 1989 a 1993 en el Principado de Andorra.
La ex número uno del mundo asegura que dejó el tenis "para conquistar mi libertad". "Mi madre decidía sobre mi pelo, mi ropa... Cuando me compraba algo por mi cuenta, rara vez le gustaba", señala la campeona de cuatro títulos de Grand Slam. Sobre su padre, revela.