SANTIAGO.- Con la salida de Josep Guardiola de la banca del FC Barcelona nace un nuevo escenario para el delantero chileno Alexis Sánchez en el club catalán.
La llegada del tocopillano fue una expresa petición del DT saliente, convenciendo a los dirigentes de la institución "blaugrana" de contratar al ariete, pese a los 40 millones de dólares que pedía el Udinese por un jugador prácticamente desconocido en el medio español.
Constantemente, Guardiola elogió al chileno por su adaptación al equipo y su entrega en el campo de juego, justificando plenamente su fichaje ante todos los escépticos que preguntaban hasta el cansancio sobre la razón del arribo de Sánchez a la ciudad condal.
Lo transformó en titular cuando se recuperó de la rotura en el bíceps femoral de su pierna derecha, que lo dejó fuera del alineación por dos meses entre septiembre y noviembre pasado. Este hecho, ayudado por las lesiones de David Villa en diciembre y la irregularidad de Pedro, pero el tocopillano respondió con creces.
Y el arribo de Tito Vilanova a la banca del club no debería cambiar el panorama. Significa la continuidad del proceso Guardiola en el Barça e incluso muchas de las decisiones que tomaba el entrenador catalán se materializaban tras consultar a su ayudante.
Eso sí, para la próxima campaña la situación de Alexis sería un tanto más complicada para ser titular. Vilanova conoce bien a las dos nuevas perlas del ataque "culé": Isaac Cuenca y Cristián Tello, promovidos por Guardiola y que fueron utilizados en partidos decisivos en desmedro del chileno: (Cuenca ante Milan y Tello frente a Real Madrid).
Además, se espera que regrese David Villa y también Barcelona tiene entre sus prioridades traer un centro delantero que cubra la falta de gol que evidenció el equipo en momentos decisivos de la temporada y así sacarle un poco de responsabilidad a Lionel Messi, que tras el gran esfuerzo anotador de la temporada llegó casi fundido a los partidos decisivos.
De esta forma, la opción del chileno se mantiene intacta en el club catalán y deberá seguir bregando por mejorar como futbolista, aunque esta vez sin el hombre que lo llevó a los pastos del Camp Nou.