Las dos "joyas" de la U que cumplieron un sueño: Marcar en un Superclásico

SANTIAGO.- Minuto 66 del segundo tiempo del Superclásico entre la U y Colo Colo, José Rojas sale por lesión y lo reemplaza Igor Lichnovsky, el juvenil de 18 años que el año pasado asombró a todos en su debut profesional ante Universidad Católica.

Tres minutos más tarde, Igor cumplió un sueño. Centro desde la izquierda de Marcelo Díaz, anticipa a la floja zaga de Colo Colo y de cabeza vence a Francisco Prieto. Explosión y júbilo en el sector sur del Nacional. El joven, que hizo toda su carrera de inferiores en la U, hacía lo que cada futbolista salido de la cantera universitaria anhela: marcar un gol en su primer clásico.

"Es algo inexplicable. Entrar a jugar el partido ya era un sueño para mí. Pero anotar un gol nunca lo esperé", declaró el adolescente nacido en Talagante y de 1,87 metros.

Pero la tarde no sólo se convirtió en histórica para el zaguero, también para otro que comienza a dar rienda suelta a su calidad: Ángelo Henríquez. El delantero de 18 años (recién cumplidos hace dos semanas) ya completó seis goles en el actual Apertura y otros dos en Copa Libertadores. Pero ayer en el Nacional comenzó su idilio "superclásico" a los 78 minutos, con un golazo de novela.

Después de 22 pases consecutivos, el ariete finalizó la jugada llena de "olés" de la hinchada azul con una volea que sorprendió a un adelantado Francisco Prieto y decretó un 4-0 humillante.

Y su celebración fue aún más especial. Se sacó la camiseta y debajo de ella lucía una polera con la imagen de Gohan, el mítico personaje de la serie Dragon Ball Z que es hijo de Gokú, el mismo que usaba Diego Rivarola, asumiendo el relevo del argentino que se retiró tras el término de la temporada 2011.

"Es un pequeño reconocimiento a Diego por todo lo que dio la U y lo que demostró en los clásicos ante Colo Colo", relató Ángelo tras el partido.

Productos de una cantera prometedora

Tanto Lichnovsky y Henríquez son los frutos de una cantera azul que en los últimos años empezó a trabajar con todo y que está comenzando a cosechar a lo grande.

Ambos, junto a Sebastián Martínez (uno de los preferidos de Jorge Sampaoli) son el reflejo del buen trabajo de las inferiores de la U durante los meses recientes y debutar en un Superclásico anotando un gol es simplemente "un sueño".

"Siempre estamos preparados para entrar, es un sueño inexplicable lo que se siente hoy, no lo esperaba, ahora sólo queda disfrutar este momento", indica Lichnovsky, con una cara de inocencia como aún sin darse cuenta de lo que hizo.

"Cumplí el sueño que tiene todo jugador de la U, marcarle un gol a Colo Colo en un clásico. Y que mejor que hacerlo en el primero que juego. De verdad que no lo esperaba tan pronto", señala Henríquez, que ya está más consolidado en la era Sampaoli.

El defensor es cauto y cree que a pesar de este momento glorioso deben seguir de esta forma y no perder el rumbo. "Estoy en una etapa de aprendizaje, mis compañeros y el cuerpo técnico siempre nos aconsejan lo que tenemos que hacer dentro de la cancha, tanto a mi, como a Ángelo (Henríquez) y Sebastián (Martínez)".

En la misma línea, Henríquez se mostró "contento por el resultado y el juego que demostramos, por cómo jugamos y por haberle ganado al clásico rival de esta forma tan amplia. Me sorprendió lo que hicimos en este partido, porque demostramos todo lo que venimos haciendo en un duelo tan importante para nosotros. Ahora sólo queda mantener este ritmo para lo que viene".

La tarde más soñada de la U en los Superclásicos tuvo a dos protagonistas nacidos y criados en el club, lo que resalta y convierte en especial uno de los triunfos más recordados en la historia del elenco laico sobre su archirrival.