El alemán Sebastian Vettel.
EFE
AUSTIN (EE.UU.).- El alemán Sebastian Vettel deberá esperar una semana para poder conquistar su tercer Mundial de Fórmula 1 consecutivo, pero en su escudería, Red Bull, ya tienen algo que celebrar: las cifras millonarias que recibirá por el título de constructores.
La clasificación final del Mundial de constructores decide el reparto de los fondos para la siguiente temporada.
Red Bull conquistó su tercer título consecutivo gracias al segundo puesto que logró el domingo Vettel en el Gran Premio de Estados Unidos.
"Hace un par de años sólo podíamos soñar con esto", dijo el jefe de Red Bull, Christian Horner, tras conquistar el título en Austin.
Red Bull, un equipo que desembarcó en la Fórmula 1 hace ocho años, dio un nuevo golpe a las clásicas escuderías de la parrilla.
"Nos merecimos la victoria", señaló Vettel tras quedar segundo en el Gran Premio de Estados Unidos.
El piloto alemán y el ingeniero Adrian Newey son los principales culpables del rápido crecimiento del equipo. Vettel logró 25 de las 34 victorias de Red Bull y sólo necesita un cuarto puesto el domingo en Brasil para conquistar su tercer Mundial.