Matías Fernández apareció en el momento justo para marcar el único tanto del partido.
APMARACAIBO/SANTIAGO.- No fue el mejor encuentro de un seleccionado chileno, tampoco el más malo, lo importante es que la Roja venció a Venezuela como visita y comenzó con el pie derecho esta nueva temporada con miras a la Copa América y las Eliminatorias al Mundial de Sudáfrica 2010.
El único gol del partido fue obra de Matías Fernández, quien apareció en el momento justo y con una genialidad, de esas que le dieron tantas alegrías a la hinchada de Colo Colo, marcó el gol del triunfo para la escuadra de Acosta. El jugador del Villarreal tomó el balón a la entrada del área, sorteó rivales y definió ante la salida del portero.
Eso le bastó al mejor jugador de América para desequilibrar, aunque durante el pleito le costó encontrarse con la pelota y en oportunidades se le vio errático y sin la movilidad que se le conocía. Pero el ex jugador de Colo Colo tiene eso de los grandes: aparece en los momentos justos.
Lo más rescatable de este nuevo equipo fue el trabajo defensivo. Nunca tuvieron mayores problemas y se notaron muy seguros a pesar de la ausencia de Waldo Ponce, uno que se daba como seguro para el pleito, pero que a última hora quedó fuera por lesión. En su reemplazo estuvo en cancha Ismael Fuentes.
Otra de las duplas que se vio sólida fue la de contención: Manuel Iturra y Arturo Sanhueza jugaron un buen partido, muy compenetrados, siguiendo a los mediocampistas venezolanos y casi siempre ganando en las pelotas divididas.
Párrafo aparte para la vuelta de Mark González, quien tuvo sólo algunos chispazos de buen fútbol y debió salir reemplazado en la segunda etapa por un malestar en su muslo izquierdo. Arriba, el más compenetrado fue Humberto Suazo, Navia tuvo un gol solo y no pudo concretar.
En líneas generales fue un buen apronte, con solidez defensiva y la tranquilidad de obtener un triunfo como visita, aunque ante un equipo que mostró poco y que en el segundo tiempo se dedicó a hacer más cambios que fútbol: siete en total.