Núñez ganó por alto, mantuvo el cero y Palestino se metió en la final.
Héctor Aravena, El MercurioLuis Musrri: "Colo Colo debería ser el finalista"
SANTIAGO.- ¿Se lo habrá imaginado Jean Paul Pineda? El cabezazo que encajó en los descuentos del partido de ida, que decretó el 2-2 final, fue la clave para que Palestino esté celebrando este sábado su paso a la final del torneo de Clausura.
El equipo árabe se convirtió en el primer finalista luego de igualar sin goles esta tarde en el estadio Municipal de La Pintana frente a Rangers, y fueron los goles anotados como visitante los que le dieron el pasaje al choque decisivo.
Lo de hoy, en todo caso, fue discreto. Finalizado el primer tiempo, el desempeño de ambas escuadras parecía darle la razón a aquellos que le restaban brillo a esta semifinal. Palestino y Rangers no parecían equipos que buscaban la final, o parecían nublados por tan alto objetivo.
Y en el complemento el panorama no cambió demasiado, pero el reloj comenzó a subir la temperatura y afloraron los nervios. Óscar Del Solar soltó a Rangers en los últimos minutos, cuando Palestino ya veía con muy buenos ojos el empate sin goles y se dedicó a defender su área con más corazón que fútbol, como dice el cliché.
Antes, alternaron el dominio. Todo pudo cambiar en el minuto 73, cuando Juan Manuel Cavallo venció a Felipe Núñez con un cabezazo en el área, pero la banderola del juez de línea hizo justicia. Estaba adelantado. Y los talquinos fueron quienes salieron a la cancha con mayor ímpetu, en el inicio del partido, pero insuficiente para hacer el gol que podía torcer el destino de la llave.
También lo tuvo Palestino, sobre todo al inicio del segundo tiempo, pero Víctor Aquino y Francisco Ibáñez no estuvieron finos y la temprana salida de Héctor Pericás, en el minuto seis por lesión, le restó creatividad al elenco de colonia.
Al final, Rangers terminó lanzando centros que nunca encontraron al ausente Gastón Cellerino y Palestino, preso de los nervios y la inexperiencia, intentando alejar lo más posible el balón de su área.
Luego, las emociones. Cellerino ofreciendo su camiseta a la gran cantidad de hinchas que viajaron desde Talca mientras en el lado opuesto la euforia ya se había apoderado de la tribuna local y los desaforados jugadores tetracolores.
Palestino está en la final y tiene la posibilidad cierta de obtener un título esquivo desde 1978. Ahora solo resta saber qué color tendrá al frente. Blanco o naranja.