SANTIAGO.- El presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Ricardo Ariztía, criticó hoy el proyecto Campaña contra la Elusión y Evasión Tributaria, señalando que la iniciativa "no busca reducir la evasión tributaria, sino que la confunde con la elusión", lo que perjudicaría principalmente a las pequeñas y medianas empresas (Pymes).
"Este proyecto no apunta a terminar con la evasión tributaria, sino que se cambian ciertos principios y derechos de los contribuyentes que gravan directamente a las empresas", sostuvo, reiterando que la medida afectaría a "un sector importante de las Pymes.
Entre los aspectos más cuestionados por Ariztía se encuentra la disposición de gravar los activos que las empresas venden cada año. Esta medida provocaría gastos importantes no sólo a los empresarios que venden activos, sino también a sus compradores.
Otro elemento es que con esta nueva ley, señaló, las empresas perderían el mecanismo de depreciación aceleradas que normalmente aplican para pagar sus impuestos en forma diferida.
En este sentido, Ariztía señaló que los sectores más perjudicados serían la Gran Minería y las Pymes.
Respecto a la propuesta planteada por los senadores DC Alejandro Foxley y Edgardo Böeninger, de reducir los impuestos a las personas, manifestó que "sería más prudente realizar un proyecto en conjunto con la reforma tributaria" pues, según explicó, es posible que existan otras alternativas
de compensación a la disminución impositiva "y no las que se han planteado hasta ahora".
No obstante, Ariztía aseguró que los empresarios están dispuestos a analizar esta propuesta, pero que "eso no significa un cheque en blanco o apoyo incondicional respecto del tema. Hay que ponerlo arriba de la mesa".
En este sentido, afirmó que la iniciativa depende del Ejecutivo pero que lo importante es "buscar un incentivo a la reinversión empresarial aumentando la tasa de retiros y disminuyendo la carga tributaria a las utilidades de reinversión".