SANTIAGO.- El superintendente de Electricidad y Combustibles, Sergio Espejo, señaló que se está muy cerca de cerrar las investigaciones referentes a la energía no recibida a raíz de las crisis eléctricas de 1998 y 1999, y de "aplicar sanciones (que comprenden compensaciones) en el caso que corresponda dentro de los próximos 30 días, porque se cometieron infracciones", anticipó.
Asimismo, el personero indicó que se están reabriendo, y en algunos casos terminando, las investigaciones que inició la autoridad por los cortes - black out - pendientes de 1999 y el año pasado.
Por otra parte, sobre los cargos que levantó contra la distribuidora Saesa por no tener asegurado el abastecimiento para 2002 -y quedarse sin contratos de suministro para proveer a sus clientes, ya que ninguna generadora se presentó a los dos llamados a licitaciones -, dijo que se está amonestando a la compañía sólo por "no disponer de energía para satisfacer a sus clientes en un horizonte mínimo de tres años, como lo obliga la ley".
Añadió al respecto que, si bien Saesa argumentó que el suministro está garantizado porque la ley no autoriza al Centro de Despacho Económico de Carga (Cedec) a desconectar una distribuidora que no tenga contratos, Espejo enfatizó que aunque la ley les garantiza a los usuarios el abastecimiento, ello no reemplaza la obligación que tienen las distribuidoras de garantizarlo.
Consultado sobre lo que está haciendo la autoridad para resolver este tema, indicó que "si bien las generadoras no están obligadas a asistir a estas licitaciones", ante una caída masiva de contratos entre distribuidoras y generadoras, se estaría frente a una situación de peligro de suministro que puede dar pié a diversos rangos de multas.