BERLIN.- El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Horst Koehler, dijo el lunes que la economía mundial dejará atrás el próximo año su actual etapa de desaceleración y repuntará en 3,6 por ciento.
Sin embargo, Koehler dijo que el organismo recortará su proyección del crecimiento económico mundial en el 2001, a 2,7 por ciento.
El funcionario del organismo dijo que el repunte del crecimiento en 2002 se basará en las recientes caídas de los precios energéticos, y en los recortes de las tasas de interés en Estados Unidos, Europa y Asia.
También dijo que el Banco Central Europeo (BCE) podría tener un mayor margen para recortar las tasas de interés si se aceleran las reformas estructurales en Europa.
"En Europa, sería apropiado prever una aceleración de las reformas estructurales. Sobre esa base, podría imaginar que el Banco Central Europeo verá un mayor margen para recortes de tasas de interés", sostuvo.
"Creo que en general, el potencial para el crecimiento en base a las nuevas tecnologías, incluidas las tecnologías de la información, no se ha agotado, por lo que hay suficiente material como para prever que los mercados ganarán confianza después de la actual corrección", dijo Koehler en relación con la reciente caída de las bolsas mundiales.
"Por ese motivo, el FMI prevé que la economía mundial se recuperará en 2002 con un crecimiento de 3,6 por ciento", agregó.
Por otra parte, el director del Fondo expresó sus dudas sobre la creación de un "impuesto Tobin", destinado a gravar los flujos de los mercados de capitales.
"En relación con la pregunta sobre si (el impuesto Tobin) puede reducir los flujos especulativos, soy escéptico. Hasta ahora, nuestros análisis parecerían sugerir que la creación de este tipo de impuesto probablemente aumentaría la especulación, debido a que surgirían nuevas formas de evitarlo", dijo Koehler.
Los principales defensores del impuesto Tobin son las organizaciones que protestan contra la pobreza en el mundo. La iniciativa, que apunta a limitar la especulación y recaudar fondos para los países en desarrollo, lleva el nombre del economista estadounidense James Tobin, que lo propuso por primera vez en la década de los 70.
