SANTIAGO.- Después de cuatro años de negociaciones con el Ministerio de Agricultura, Silvicultura y Pesca de Japón, con el objeto de que retirara la prohibición de ingreso a territorio nipón de las cerezas chilenas, Chile está en condiciones de acceder a un mercado de 130 millones de habitantes, con un ingreso per cápita de US$ 35.000 y en una época del año en que casi ningún país puede llegar con este producto a ese mercado.
El ministro de Agricultura, Jaime Campos, explicó que la noticia le fue dada muy temprano esta mañana mediante un llamado telefónico del embajador de Chile en Japón, Demetrio Infante, y el agregado agrícola en ese país, Pedro Correa, para informarle que el miércoles concluyó en la nación nipona la audiencia promovida por la cartera japonesa en relación con la autorización para el ingreso de cerezas chilenas a Japón.
"La audiencia concluyó positivamente sin registrarse oposición y, por ende, ahora entramos en una etapa administrativa que nos va a permitir ingresar a Japón por lo menos en la mitad de la presente temporada", puntualizó.
Después de un largo trabajo y de experimentos realizados en Chile, a principios del año 2000 se acordó técnicamente el método que se utilizaría con el objeto de poder exportar cerezas a Japón. Este consiste en la fumigación con Bromuro de Metilo de las cerezas antes de su exportación.
"Ahora que esta entrada que se concreta puede implicar para los productores nacionales de cerezas una alta significación, porque por razones estacionales, Chile se va a transformar en el único país que va a poder llegar con cerezas a ese país en una época determinada del año. Además, Japón es un gran consumidor de este producto y también paga precios que son inimaginables para un consumidor chileno", sostuvo el secretario de Estado.
Las zonas del país que más beneficiadas se verán con este ingreso, serán la localidad de Romeral y Curicó, pero el ministro Campos señaló que este cultivo se ha ido extendiendo a otras zonas de la VIII y IX regiones, "por lo que será un beneficio país".
Chile también exporta cerezas al mercado europeo y será el primer país en enviar este producto a Japón, luego que Estados Unidos perdiera tal condición por las altas exigencias niponas.
Trámites pendientes
Sólo restan para la entrada de cerezas a Japón, la modificación de la ley de cuarentena vegetal (Plant Protection Law and Emforcement Regulations), lo que tomará un tiempo que puede llegar a 60 días, basado en los antecedentes históricos que existen respecto al tema y al tratamiento que han recibido otros países para casos similares. "De todos haremos las gestiones del caso para intentar reducir este plazo, para lo que esperamos la comprensión de las autoridades niponas", señaló Campos.
Una vez modificada la ley de cuarentena, el Gobierno japonés deberá enviar un inspector a Chile, el que deberá verificar las instalaciones en donde se aplicará el bromuro de metilo.
Ahora sólo cabe esperar que el Gobierno nipón termine con sus trámites internos, para que Chile ingrese a ese mercado. En todo caso, todos aquellos exportadores que estén interesados en acceder a dicho mercado deben solicitar detalles de los requisitos necesarios en el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).