WASHINGTON.- El presidente de Microsoft, Bill Gates, afirmó hoy que el acuerdo alcanzado con el Departamento de Justicia de EE.UU. es "justo, razonable y, lo que es más importante, (se ha hecho) en el mejor interés de los consumidores y la economía".
Gates se mostró muy satisfecho del acuerdo que resuelve la demanda presentada hace tres años por el Departamento de Justicia contra Microsoft por actuar como un monopolio.
El fiscal general de EE.UU., John Ashcroft, destacó la trascendencia del acuerdo, porque impone durante cinco años numerosas restricciones a las operaciones del mayor fabricante mundial de programas informáticos.
Ashcroft señaló que el acuerdo "pone fin a una conducta ilegal por parte de Microsoft, aporta un alivio para el mercado y asegura que los consumidores tendrán más alternativas para cubrir sus necesidades informáticas".
Gates afirmó que, aunque el acuerdo impone severas normas y restricciones en el negocio de Microsoft, "resuelve el caso lo que es adecuado para los consumidores, para el sector tecnológico y la economía" del país.
El acuerdo alcanzó a instancias de la juez Colleen Kollar-Kotelly, que había solicitado a ambas partes que llegaran a un arreglo que evitara la imposición de sanciones por las prácticas comerciales desleales de Microsoft, que han perjudicado a sus competidores.
El Gobierno federal y los gobiernos de 19 estados habían iniciado en 1997 una demanda sin precedentes contra Microsoft, acusándola de prácticas ilegales para el mantenimiento y extensión de su predominio en el mercado de los programas de ordenadores.
El acuerdo impondrá "una amplia gama de restricciones" que pondrán fin a la conducta ilegal de la firma, impedirán que vuelva a repetirse ese comportamiento y restablecerán la competencia equitativa en el mercado.
El objetivo de estas sanciones será "el logro de un alivio pronto, eficaz y cierto para los consumidores y las empresas".
El acuerdo ahorrará al Gobierno federal el engorroso proceso de aplicación de sanciones, a cada una de las cuales Microsoft podría interponer apelaciones y reclamos prolongando el trámite durante años.