TOKIO.- El nacimiento el sábado del primer hijo de los príncipes herederos de Japón no animó hoy la bolsa de Tokio, pues la quiebra del gigante energético estadounidense Enron generalizó los temores a nuevos efectos negativos en la economía japonesa.
Al finalizar el día, el índice selectivo Nikkei bajó 326,82 puntos (3,1 por ciento) para cerrar en 10.370,62 puntos, mientras que el otro indicador general, Topix, que agrupa los valores de la segunda sección, cedió 20,81 puntos y se situó en 1.029,41 puntos.
El volumen de negociación bajó a 728 millones de acciones, frente a los 730 millones del viernes.
Bajaron de precio 1.003 títulos, mientras que 355 subieron y 114 repitieron cotización.
Según fuentes del mercado la quiebra presentada en EE.UU. por Enron actualizó el sentimiento de crisis económica que padece Japón desde hace una década, pues aunque ya se asumió la semana pasada, el descalabro de la gigantesca corporación estadounidense echó por tierra la construcción de cuatro centrales eléctricas en este país que tenía proyectadas.
Además, los analistas subrayaron que la bancarrota de Enron producirá fuertes pérdidas a los fondos especiales de compañías inversoras japonesas centrados en bonos de aquella compañía.
El continuo retroceso del yen frente al dólar estadounidense aceleró aún más la marcha negativa del mercado de renta variable.
Todos estos datos anularon el empuje que se esperaba tuviera el nacimiento de la hija de los príncipes herederos de Japón, Naruhito y Masako, el pasado sábado, pese a que, al no ser varón, no podrá acceder al Trono del Crisantemo sin un cambio en la legislación.
Los economistas habían calculado que el nacimiento del tercer nieto de los emperadores produciría un impulso del producto interno bruto de 14 billones de yenes (unos 112.000 millones de dólares) y animaría el consumo individual.
La mayoría de los 33 grupos bursátiles perdió posiciones, pero destacaron los de inmobiliarias, minas y telecomunicaciones.
Los títulos de alimentación y establecimientos relacionados con la restauración tuvieron notables retrocesos ante el descubrimiento del tercer caso de encefalopatía espongiforme bovina ("vacas locas") en este país.