SAO PAULO.- Los mercados de América Latina cerraron el viernes al alza, pese a que Argentina se desliza rápidamente hacia una devaluación de su moneda o bien a la moratoria más grande de la historia de una deuda pública.
Mientras los legisladores en Buenos Aires aceptaban la renuncia del presidente Fernando de la Rúa, las bolsas de Brasil, México y Chile avanzaban y sus monedas permanecían sólidas o también ganaban terreno.
Los mercados argentinos estuvieron cerrados el viernes, después de que De la Rúa anunció su dimisión el jueves, tras la violenta revuelta contra las fallidas políticas de austeridad económica aplicadas por su gobierno en el último año.
El presidente del Senado Ramón Puerta, del opositor Partido Peronista, es ahora el presidente interino, aunque se espera que el Congreso haga un pronto llamado a elecciones extraordinarias.
"La sesión ha sido muy positiva en toda la región, pero Argentina es otro cuento", dijo Aryam Vázquez, analista para Latinoamérica con la firma IDEAglobal de Nueva York.
Durante casi un año, los mercados de la región han sido vapuleados por la crónica inestabilidad de Argentina. Pero aunque los analistas dicen que las perspectivas de una moratoria o de una devaluación van en aumento, varios inversores afirmaron que los mercados de la región tomaron con calma el alboroto.
En Brasil, el país potencialmente más vulnerable al temblor en Argentina por su cercanía comercial y sus lazos políticos, los operadores hicieron notar que las perspectivas de una mejoría en la economía interna servirían para contrarrestar los nervios provocados por Argentina.
"Dada la gravedad de la situación, la reacción no ha sido tan mala", dijo Reginaldo Alexandre, jefe de análisis para la corredora Itau en Sao Paulo.
El índice clave de Sao Paulo, el Bovespa , cerró con un alza de 3,49 por ciento mientras que su moneda, el real , cerró apenas con una ligera baja a 2,34 unidades por dólar.
En Chile, el listado referencial IPSA amarró una ganancia de 0,99 por ciento mientras que el peso cerró sin cambios a 666 unidades por dólar.
En México, los inversores prefirieron enfocarse sobre una reforma clave para reforzar la débil recaudación fiscal del gobierno mexicano, que depende fuertemente de sus ingresos por ventas de petróleo y donde apenas 11 por ciento de la población paga impuestos.
Los capitales han fluido en México sin que la crisis Argentina tenga mayor efecto en sus mercados financieros debido a los estrechos lazos comerciales del país con Estados Unidos.
El listado IPC cerró 1,87 por ciento arriba mientras que el peso consolidó su posición a 9,1170 unidades por dólar.