BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) y Chile firmaron hoy de manera formal el Acuerdo de Asociación político, comercial y de cooperación que, tras muchos meses de negociación, alcanzaron en la Cumbre Eurolatinoamericana celebrada en Madrid en mayo de este año.
La firma ultima los trámites para la entrada en vigor del Acuerdo en 2003 y fue realizada por la ministra chilena de Relaciones Exteriores, Soledad Alvear, y por varios representantes de la UE, entre ellos el comisario de Relaciones Exteriores, Chris Patten, y una buena parte de los ministros de Asuntos Exteriores de los quince países que integran la Unión.
El Acuerdo entre la UE y Chile fue calificado hoy por un portavoz europeo como el "más ambicioso" de los suscritos por el bloque con un país que no aspire a formar parte de la UE.
Con este Acuerdo, se diversificarán y expandirán las relaciones comerciales entre ambas partes, ya que se liberalizará de forma progresiva y recíproca el acceso a los mercados de bienes, servicios y compras gubernamentales.
Se ha calculado que en total el pacto permitirá a Chile y a la UE llevar a cabo una liberalización de más del 90 por ciento de sus intercambios comerciales, de servicios y de inversiones.
Para el país sudamericano supondrá que sus productos podrán acceder a un mercado de más de 300 millones de personas, que además crecerá a corto plazo, en 2004, con la ampliación de la Unión a 10 nuevos países.
Además, el acuerdo incluye también un capítulo sobre las indicaciones geográficas de vinos y bebidas alcohólicas, y supondrá una apertura del sector pesquero chileno a las inversiones procedentes de la UE.
En lo que se refiere al aspecto político, se establecen los medios para el diálogo entre las dos partes y se reitera el compromiso con el sistema democrático.
El Acuerdo de Asociación también incluye un entendimiento para la cooperación y la transferencia científico-tecnológica.
Antes de firmar el Acuerdo, la UE ya era el principal inversor extranjero en Chile, con un total de 17.449,9 millones de dólares en el periodo comprendido entre 1974 y 2001, de los que más de la mitad (9.330 millones de dólares) proceden de España.
Por su parte, Chile exportó a la UE por valor de 4.594,1 millones de dólares sólo en el año 2001.