SANTIAGO.- El Gobierno desmintió esta tarde que a partir de mañana vaya a producirse un recorte total de gas argentino para el sector industrial chileno.
"No hay ninguna novedad con Argentina. No ha pasado absolutamente nada nuevo en relación con el suministro de gas desde Argentina a Chile que no haya ocurrido desde los últimos seis meses o el último año desde que empezamos a tener restricciones", aseguró el secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía (CNE), Luis Sánchez Castellón.
Agregó que "hemos hecho un llamado y queremos reiterarlo, a que los medios de comunicación contribuyan a difundir las noticias en su justo término. El evento de que no haya gas para las industrias en la Región Metropolitana, es un evento que ha ocurrido por lo menos una docena de veces durante el presente año. Y eso no ha sido jamás noticia de primera plana".
"Yo no digo que los industriales que no reciben gas no deban preocuparse, porque tienen que reemplazar el gas que no reciben por petróleo diesel y eso es muy caro. Pero eso no significa que haya un corte intempestivo, porque esto tiene que ver con algo que ha venido ocurriendo y va a seguir ocurriendo. Eso el país lo sabe, durante unos tres años a lo menos, hasta que tengamos una fuente de suministro de energía alternativa", añadió.
El gas para uso doméstico está garantizado
Asimimo reiteró que el gas para uso en viviendas está garantizado: "Nunca se ha cortado el 100 por ciento del suministro y nunca se va a cortar el 100 por ciento del suministro. El Presidente de la República lo ha dicho en una gran cantidad de oportunidades que el abastecimiento residencial jamás ha tenido amenazas".
Según habían informado fuentes del mercado al diario La Segunda el nuevo recorte se produciría debido a un redireccionamiento del suministro argentino para el consumo interno debido a la mayor demanda de este combustible por las bajas temperaturas que hoy día llegaban a 4°C.
En las últimas semanas el suministro de gas argentino se ha mantenido estable, e incluso a esta semana los recortes no han superado el 11%, muy distante del hasta 60% que se registraron en el peor momento de la crisis durante abril-mayo del presente año.
