SANTIAGO.- La ministra de Minería y Energía, Karen Poniachik, negó hoy que el suministro residencial de gas natural hubiese estado en riesgo, como lo informó el embajador de Chile en Argentina, Luis Maira.
De acuerdo al diplomático, este año, y en dos oportunidades, no ha llegado suficiente gas como para satisfacer la demanda de los hogares.
La secretaria de Estado agregó que el Gobierno no negociará en la reunión que sostendrá este viernes con las autoridades argentinas para aclarar el impacto del nuevo tributo que Argentina aplicará a los envíos del combustible a nuestro país.
"Nosotros no vamos a negociar porque nosotros no negociamos sobre todo si se trata de una decisión del Gobierno argentino que tiene que ver con impuestos locales, nosotros no vamos a negociar eso", destacó.
Poniachik indicó que en el encuentro "vamos a informarnos de lo que se está haciendo, vamos a ir a conversar y hacer valer nuestros puntos de vista".
Destacó además que el objetivo es manifestar a las autoridades argentinas la confianza de Chile respecto de que se respetarán los compromisos y "que cualquier cobro o impuesto adicional que ellos apliquen tenga el menor impacto posible en las tarifas y en el precio del gas que pagan los chilenos".
Por su parte, el nuevo presidente de la Asociación de Empresas Elécticas, Rodrigo Castillo, hizo un llamado a la tranquilidad a la ciudadanía, porque -según dijo una ventual alza en el precio del gas no tendrá en el corto plazo un impacto directo en las cuentas eléctricas.
Luego de la firma del acuerdo entre Argentina y Bolivia, la prensa bonaerense afirmó que el Gobierno trasandino estudia traspasar a Chile el aumento de precio del gas que importa desde el país altiplánico.
Actualmente, Argentina paga 3,2 dólares por cada millón de unidades térmicas británicas (BTU), valor que subirá a cinco dólares a partir de julio.
