El pacto por el euro y el fondo de rescate forman parte de un paquete medidas contra la crisis de la deuda que la UE tiene previsto aprobar en la cumbre del 24 y 25 de marzo.
BloombergBRUSELAS.- Los ministros de Finanzas de la zona euro discutirán mañana el desarrollo del pacto por el euro alcanzado el viernes que prevé medidas como el ajuste de los salarios a la productividad, el retraso en la edad de jubilación o una mayor coordinación en el impuesto sobre sociedades.
Con este acuerdo, que bebe del pacto de competitividad propuesto primero por Francia y Alemania, se pretende dar una respuesta global a la crisis y despejar las dudas que siguen pesando sobre la región y que afectan en especial a los socios más débiles como Portugal.
La ministra española de Economía y vicepresidenta del Gobierno, Elena Salgado, defenderá las propuestas españolas para ceñirse a la disciplina presupuestaria y posibles nuevos ajustes de los salarios a la productividad, sobre los que ya se mostró partidario el Presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero.
El pasado viernes, de madrugada, los líderes de los Diecisiete adoptaron un pacto para impulsar la competitividad de la región, que recoge la mayor parte de las exigencias planteadas por Berlín como condición para aumentar el fondo de rescate para países con problemas de financiación.
La eurozona acordó incrementar la capacidad efectiva del fondo de rescate hasta los 440.000 millones de euros comprometidos -que se suman a la aportación de la Comisión Europea y del Fondo Monetario Internacional, hasta sumar 750.000 millones-.
La Eurozona también aprobó flexibilizar este fondo de rescate de forma que se dé cabida a los mercados de deuda, y por tanto ser útil para países como Grecia, a quien se abarataron y facilitaron las condiciones de préstamo para facilitar la recuperación de la economía nacional.
Esto de dar cabida a los mercados de deuda es fundamental ante el recrudecimiento de la crisis en Portugal, cuya deuda se sitúa a intereses superiores al 7 %.
El pacto por el euro y el fondo de rescate forman parte de un paquete global de medidas contra la crisis de la deuda que la Unión Europea tiene previsto aprobar durante la cumbre del 24 y 25 de marzo.
Dentro de este conjunto de iniciativas se encuentra también la creación de un fondo de rescate permanente -para sustituir al actual que caduca en 2013-, la celebración de una nueva ronda de test de solvencia a la banca, la suavización de las condiciones de los rescates de Grecia e Irlanda, así como la reforma de la disciplina fiscal -un conjunto de seis textos legislativos conocido como el paquete de gobernanza-.
España no tiene grandes reservas sobre los seis textos legislativos, que incluyen mayores sanciones para los países infractores, aunque le gustaría que también se sancionara a los países que tienen demasiado superávit -como en el caso de Alemania-, y no sólo a los que poseen déficit comerciales -como España-.