Robert Zoellick, presidente del Banco Mundial.
Bloomberg.PEKÍN.- Crecer sin dañar el medio ambiente, adecuar las grandes urbes a su rápida expansión o modernizar los sistemas fiscales y financieros son algunas de las obligaciones que el presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, ha marcado a China para que el país asiático "no falle en su transición económica".
Zoellick, en una conferencia ofrecida en Pekín dentro de la visita de cuatro días que realiza a China, habló de estos problemas ahora que, dijo, el país "afronta su nuevo estatus de economía media-alta", transición, recordó, en la que "muchos países han fallado".
"Partimos de la idea de lograr una China que, en 2030, sea moderna, armoniosa, creativa, con altos ingresos y responsable dentro del rol que desempeñará dentro de la economía mundial", declaró Zoellick.
El presidente del Banco Mundial aseguró que, durante las últimas décadas, China ha experimentado "drásticos cambios" y alabó algunos de ellos como el crecimiento continuado en dos cifras, la mejora de las condiciones de vida o el incremento en las exportaciones.
Sin embargo, Zoellick hizo hincapié en la importancia de "modificar las estrategias de crecimiento una vez alcanzada la consideración de economía media-alta" algo para lo que "no basta con saber qué hacer, si no, principalmente, cómo hacerlo".
"La clase política china, como se ha visto en sus últimos Planes Quinquenales (XI y XII), sabe que hay que potenciar el consumo interno, hacer reformas que mejoren el rendimiento de la economía y equilibrar la situación en las zonas urbanas y rurales, pero creo que su mayor desafío es llevar todo ello a cabo", afirmó.
Además de los desafíos que el gigante asiático tendrá que llevar a buen puerto, Zoellick citó varios de los riesgos que amenazan a la economía china, tales como el incremento en el precio de los alimentos o la crisis económica que afecta a Europa ya que, como advirtió, "en un mundo globalizado todo afecta a todos".
Otras reformas, principalmente referidas al papel del Estado en materia de leyes fiscales, mercado laboral o gestión de recursos se presentarán, según Zoellick, como "aspectos a tener en cuenta para el desarrollo estable de China como gran actor económico mundial".