MADRID. La huelga de pilotos, tripulantes de cabina y personal de tierra de Iberia contra la creación de la filial de bajo costo de la aerolínea española obligó hoy a la cancelación de 121 vuelos de los 323 que tenía previstos la compañía para la jornada, si bien ésta transcurría con "relativa normalidad".
El de hoy fue el primero de cinco días de paro previstos para febrero, un mes en el que coincidirán las huelgas de pilotos, tripulantes y personal de tierra. Según la propia empresa y los representantes de los trabajadores, la jornada se desarrollaba sin incidentes.
Hasta ahora, sólo los pilotos habían protagonizado paros, ocho jornadas desde diciembre. En enero, el sindicato mayoritario de los tripulantes de cabina y dos minoritarios del personal de tierra decidieron también protestar.
Esta primera jornada de huelga conjunta es "el primer paso de una campaña de movilizaciones para lograr que la empresa reconsidere su postura", manifestó hoy un portavoz sindical.
El sindicato de pilotos Sepla alega que la creación de Iberia Express, que previsiblemente comenzará a operar el 25 de marzo, contraviene el convenio que se firmó con ellos cuando Iberia y British Airways se fusionaron y aseguran que supondrá la pérdida de 5.000 puestos de trabajo.
La aerolínea, por su parte, defiende la legalidad de su futura filial de bajo coste y señala que su creación es necesaria para afrontar las pérdidas de Iberia en el corto y medio radio, así como para crear riqueza y empleo.
Iberia cuenta con unos 20.000 trabajadores. De ellos, en torno a 1.500 son pilotos, 3.500 son tripulantes de cabina y 15.000, personal de tierra.