ROMA.- El Producto Interior Bruto (PIB) italiano retrocedió en el primer trimestre de 2013 un 0,6% con respecto al último de 2012, según los datos definitivos divulgados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (Istat), que empeoran en una décima porcentual la cifra preliminar ofrecida en mayo.
Con las cifras ya definitivas, también empeoran los datos del PIB de enero a marzo pasados con respecto a los mismos meses de 2012, pues la caída fue del 2,4%, también una décima porcentual superior a la indicada a mediados de mayo de modo preliminar.
Este retroceso de la economía italiana, el séptimo trimestre con el PIB en rojo consecutivo, lleva al Istat a prever que la caída del PIB en el conjunto de 2013 será del 1,6% (una décima mayor que la que se preveía en mayo), después de que el año pasado se cerrara con un retroceso del 2,4%.
Con respecto al último trimestre de 2012, el consumo interno y las inversiones fijas brutas retrocedieron, respectivamente un 0,3 y un 3,3%, mientras que las exportaciones cayeron un 1,9% y las importaciones también se redujeron un 1,6%.
La mayor caída en el consumo interno en Italia se registró en las familias (un 0,5% intertrimestral), algo que preocupa en mayor medida al Gobierno, que tiene ante sí la prevista subida del tipo general del IVA del 21 al 22% para el próximo julio y que intenta, al menos, aplazar durante unos meses.
La producción industrial italiana también retrocedió en abril, un 0,3%, con respecto al pasado marzo, y un 4,4% si se compara con el mismo mes de 2012, lo que supone la vigésima caída consecutiva.
Los mayores retrocesos interanuales se produjeron, sobre todo, en la producción de bienes de consumo (-5,8%) y de bienes instrumentales e intermedios (ambos con un -4,5%), mientras que la de energía disminuyó un 2,3%.