TOKIO.- Los dos únicos reactores activos en Japón fueron inspeccionados el sábado para verificar si pueden continuar funcionando tras la entrada en vigor de nuevas normas de seguridad en julio y, según un experto de la autoridad de regulación nuclear nipona, parece que no tienen problemas críticos.
La visita al complejo atómico de Ohi, enclave situado en el oeste del archipiélago explotado por la compañía Kansai Electric Power (Kepco), estaba destinada a examinar los dispositivos para hacer frente a cualquier imprevisto en los reactores 3 y 4, los dos únicos en funcionamiento actualmente en Japón, país que cuenta con 50 reactores comerciales.
"No tuvimos la impresión de que hubiera algo claramente insuficiente o que necesitara una mejora urgente", declaró a la prensa un responsable de la misión, Toyoshi Fuketa.
Este anuncio hace suponer que los dos reactores deberían poder continuar funcionando después de que el mes que viene se apliquen normas de seguridad más severas, aunque la decisión definitiva se tomará a finales de mes.
El anterior gobierno nipón autorizó la puesta en marcha de los reactores 3 y 4 de Ohi en verano de 2012 durante unos 13 meses (duración habitual entre dos sesiones de mantenimiento).
Esta autorización se produjo antes de que, el pasado mes de septiembre, se estableciera una nueva autoridad de regulación encargada de elaborar normas más severas, especialmente ante catástrofes naturales, accidentes de avión y actos terroristas.
La finalidad de la inspección del sábado era asegurar que estos dos reactores no incumplían estas nuevas normas.
Actualmente, los otros 48 reactores del país están parados por mantenimiento y controles adicionales tras el accidente de Fukushima causado por el sismo y el tsunami del 11 de marzo de 2011.