MADRID.- El Consejo de Administración de Repsol ha rechazado hoy por unanimidad la primera oferta formal presentada por el gobierno argentino para compensar la nacionalización de YPF el pasado año, al considerarla "insatisfactoria" y basada en "activos sobrevalorados".
El Consejo ha optado por desestimar la oferta tras una larga reunión en la que la directiva ha realizado un "exhaustivo análisis técnico y económico interno", apoyado en informes externos, según ha indicado hoy la petrolera en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La propuesta del Gobierno argentino estudiada por el Consejo contemplaba la creación de una sociedad conjunta entre Repsol, YPF y Pemex para explotar el 6,4 % del yacimiento de Vaca Muerta e implicaba la retirada de todos los litigios judiciales abiertos por la empresa española.
Esta sociedad habría estado participada en un 51% por YPF; en un 47% por Repsol y en un 2% por Pemex, titular del 9,49% del capital de la petrolera española y la encargada de llevar al Consejo la propuesta.
Además, Repsol recibiría 1.500 millones de dólares (1.147 millones de euros) en "capital", que tendría que invertir obligatoriamente en la sociedad conjunta para financiar los proyectos de explotación.
En conjunto y según la valoración realizada por YPF, la oferta ascendería a US$ 5.000 millones: US$ 1.500 millones de los bonos y US$ 3.500 millones de la participación en la sociedad.
Estos términos han resultado insuficientes para el Consejo de Repsol, que ha considerado que este importe "no responde en su cuantía a la pérdida sufrida por Repsol", ya que se basa en "activos sobrevalorados", es decir, tasados por encima del precio de mercado de operaciones similares.
Además, ha estimado que la oferta carece de algunos de los elementos que la petrolera cree imprescindibles, como una compensación monetaria "disponible o realizable" o unas "mínimas garantías jurídicas y económicas", y porque, además, implica "obligadas y cuantiosas inversiones".
A pesar de ello, Repsol ha valorado el "interés" del Gobierno argentino por alcanzar una solución negociada y ha confiado en que mantenga esta "actitud abierta al diálogo" para llegar a una "justa compensación" que permita retirar los litigios pendientes.
Esta mañana, el presidente de Sacyr, Manuel Manrique, que también es vicepresidente de Repsol en representación de la constructora -titular de un 9,53 % de su capital-, aseguró que acudía al consejo con un afán constructivo, en aras de sumar esfuerzos y no dividir.
En una rueda de prensa previa a la junta de accionistas que celebra mañana el grupo de infraestructuras, Manrique abogó por un clima de paz en el consejo de la petrolera que preside Antonio Brufau, ya que "lo que es bueno para Repsol es bueno para Sacyr".
El gobierno argentino anunció el 16 de abril de 2012 la nacionalización del 51 % de las acciones de YPF, todas ellas de Repsol, al considerar de interés "público nacional" el sector de los hidrocarburos.
Desde entonces, Repsol ha reiterado su disposición a negociar una compensación "justa" en activos lo más líquidos posibles, al tiempo que ha emprendido una batalla judicial en tribunales españoles, estadounidenses y argentinos, así como en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi).