LISBOA.- El Gobierno portugués prevé una subida de los precios durante 2014 del entorno del 1%, ligeramente mayor a la registrada en 2013, lo que espera genere "alguna mejora de la rentabilidad para los empresarios".
Así lo apunta el Ejecutivo en un informe que acompaña los Presupuestos Generales del Estado para el próximo año, cuyo contenido fue divulgado hoy por medios lusos, y en el que se destaca "la ausencia de tensiones inflacionistas en los mercados internacionales de materias primas".
Sin embargo, este moderado incremento de los precios no impedirá una mínima recuperación del consumo privado, que tras desplomarse durante los últimos años -debido a las severas medidas de austeridad aprobadas en el país- podría volver a crecer un ligero 0,1 %, de acuerdo con las estimaciones oficiales.
También está previsto que aumente la inversión, cerca de un 1,2%, gracias a unas "condiciones de financiación más favorables".
El gasto público, sin embargo, seguirá cayendo y se calcula que retrocederá en 2014 un 2,8% "como resultado de continuar con el proceso de ajuste" iniciado en 2011, cuando las autoridades lusas se comprometieron con la UE y el Fondo Monetario Internacional a aplicar un duro plan de recortes a cambio de su rescate financiero.
Portugal prevé cerrar 2013 con una tasa de inflación de cerca del 0,6%, lejos del 2,7 % registrada el año anterior.
Para el próximo año una de las mayores subidas de precio será la de la luz, que se incrementará en un 2,8 % a partir de enero, de acuerdo con la Entidad Reguladora de los Servicios Energéticos (ERSE).
El país, que terminará 2013 por tercer año consecutivo en recesión, regresará según los pronósticos oficiales a la senda del crecimiento ya en 2014, con una subida del PIB del 0,8 %.
Sin embargo, las previsiones son menos optimistas respecto al empleo y apuntan a que la tasa de desempleo ronde el 17,7%.
El Gobierno luso confía en cerrar con éxito el programa de austeridad acordado con la troika para que Portugal deje de estar bajo la asistencia financiera internacional en junio de 2014, aunque ya ha precisado que la política de ajustes deberá continuar en los próximos años para garantizar la sostenibilidad de sus cuentas públicas.