MADRID.- El comercio minorista ha sido uno de los sectores que más ha sufrido con la crisis económica en España, ya que ha visto caer su facturación en 11.220 millones de euros en el bienio 2012-2013, con sendos descensos del 6,8% y del 3,9%.
Así lo pone de manifiesto la Confederación Española de Comercio (CEC) a raíz del informe económico sobre la evolución del comercio minorista 2012-2013, elaborado por la catedrática de Investigación Comercial de la Universidad Autónoma de Madrid, María Jesús Yagüe, al que tuvo acceso Europa Press.
Esta situación, según los comerciantes, se encuentra fuertemente condicionada por el desplome del gasto de los hogares en bienes comercializados por el comercio minorista, que en 2012 cayó cerca del 6%.
"Todo ello, viene a refrendar la estrecha relación directa entre consumo de los hogares y ventas minoristas", señala la CEC, que considera que no se trata por tanto de un problema de oferta comercial, con una mayor amplitud de horarios comerciales, sino de un problema de demanda causado por la reducción de la renta disponible de los hogares, a su vez marcada por la caída de la remuneración de los asalariados, unida a los altos niveles de desempleo (25,9%).