BOGOTA.- Habitantes del norte de Colombia protestaron por la posible creación de una segunda zona de desmilitarizada para la realización de diálogos de paz con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
"Nos están acompañando en solidaridad unas 12.000 personas. Son bastantes los municipios de la región que están presentes", dijo ayer Danuil Macera, el alcalde de San Pablo, uno de los poblados que sería desmilitarizado.
Varios campesinos de la zona que se conoce como Magdalena Medio caminaron por las calles de San Pablo, poblado a 310 kilómetros al norte de Bogotá, con carteleras con frases que aludían a su rechazo, como "No al Despeje".
"Si nosotros vamos a prestar la casa, que nos dejen opinar cómo se va a manejar", dijo Delmar Rufos, alcalde de Santa Rosa, uno de los municipios vecinos. El gobierno del presidente Andrés Pastrana ha realizado en los últimos meses conversaciones con el ELN, y se ha acordado tentativamente el despeje de dos municipios de esta región.
Pero los pobladores se oponen a que se le entregue el control de una zona a esta guerrilla, temerosos de que se repita la experiencia de la zona desmilitarizada para las negociaciones con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
En la región desmilitarizada del Caguán, del sur del país, se han denunciado ejecuciones, reclutamiento de menores, campos de secuestrados, narcotráfico y la expulsión de las autoridades judiciales por parte de las FARC. El Alto Comisionado para la Paz, Camilo Gómez, rechazó las protestas y dijo que se está conversando con la comunidad.