RIO DE JANEIRO.- Los estibadores del puerto brasileño de Santos, que el jueves iniciaron un boicot contra los productos procedentes de Canadá como protesta al veto impuesto por ese país a la carne bovina brasileña, tuvieron que suspender temporalmente su protesta para no perjudicar a un importador.
Los manifestantes se negaban a descargar las 48.000 toneladas de azufre que llegaron ayer a Brasil en un navío procedente de Canadá.
Pero hoy, viernes, aceptaron suspender temporalmente el boicot al ser informados de que las pérdidas serían asumidas por el importador brasileño.
Los estibadores descargaron el azufre canadiense debido a que el importador brasileño les informó de que ya había pagado por la carga y de que tendría que abonar cerca de 15.000 dólares por cada día que el navío permaneciese anclado en el puerto de Santos.
Los trabajadores del puerto de Santos, sin embargo, advirtieron de que el boicot continuará y que no descargarán ningún barco procedente de Canadá hasta que ese país no anuncie el fin del veto impuesto a la importación de carne bovina brasileña.
El puerto de Santos es el mayor de América Latina. La protesta fue organizada por los dirigentes de la central Forza Sindical, que ya han realizado otras manifestaciones en contra de la restricción canadiense.
Canadá suspendió hace dos semanas las importaciones de carne bovina brasileña por un supuesto peligro de contagio del mal de las "vacas locas".
La restricción también fue levantada por los EEUU y México, debido a los compromisos que los dos países tienen con Canadá en el Tratado de Libre Comercio (TLC) de Norteamérica.
Los brasileños, que niegan la existencia de la enfermedad en la cabaña nacional, interpretaron la medida canadiense como una represalia al país por la guerra comercial que desde hace cuatro años traban las fabricantes de aviones comerciales medianos Bombardier, de Canadá, y Embraer, de Brasil.
Las exportaciones brasileñas de carne a Canadá en el 2000 sumaron los 5,5 millones de dólares, menos de un uno por ciento de los 800 millones de dólares de carne vendidos al exterior.
En el 2000, Brasil exportó a Canadá productos por valor de 565,6 millones de dólares, e hizo importaciones por 1.085 millones de dólares.
En la actualidad, una misión técnica del TLC visita Brasil para verificar la supuesta existencia del mal de las "vacas locas" en el país suramericano y anunciar, en caso de que no se verifique la presencia de la enfermedad, el fin del veto a la carne bovina brasileña.