JERUSALEN.- El Primer Ministro electo israelí, el derechista Ariel Sharon, ha dado instrucciones a su equipo negociador con el Partido Laborista de que no se entregue el ministerio de Finanzas a un miembro de ese partido.
Hasta que el martes pasado el todavía Primer ministro, Ehud Barak, anunció que rechazaba la cartera de Defensa en un ejecutivo de Sharon, en las negociaciones para la unidad se daba por hecho que los laboristas obtendrían este Ministerio además del de Exteriores.
Pero tras la retirada de Barak, en el seno del partido Laborista, dividido y en plena lucha interna, hay una creciente demanda para obtener la cartera de Finanzas a cambio de la de Defensa. Sharon ha ofrecido Defensa al veterano político laborista Simón Peres, conocido por sus ideas pacifistas pero artífice del poderío militar israelí.
El secretario general del Partido Laborista, Raanan Cohen, encabeza la corriente que desea obtener la cartera de Finanzas. Pero Sharon dijo anoche al diario "Yediot Ajronot" que está decidido a guardar esta cartera para un miembro de su partido, el Likud. "Mi posición no ha cambiado. No entregaré la cartera de Finanzas", dijo Sharon, según el rotativo.
Allegados del Primer Ministro electo señalaron que "al principio dimos a elegir a los laboristas, y eligieron Defensa y Exteriores porque les parecieron las carteras más importantes". "Nosotros ya hemos decidido la distribución de los otros Ministerios para el Likud y otros partidos asociados, y no vamos a cambiar de idea debido a guerras internas o porque alguien quiera la cartera de Finanzas", agregaron.
Otros destacados miembros del Partido Laborista, entre ellos los todavía ministros de Exteriores, Shlomo Ben Ami, y Justicia, Yosi Beilin, insisten en que su formación política no debe entrar en un gobierno de coalición, y en cambio debe pasar a la oposición.
Con este fin, Ben Ami celebrará hoy una reunión en su oficina con todos los que se oponen en su partido a entrar en un ejecutivo de unidad con la derecha nacionalista.