BUENOS AIRES.- Ganaderos del noroeste de la provincia de Buenos Aires denunciaron que sus animales sufren de fiebre aftosa pese a haber sido vacunados, mientras el gobierno argentino, que presentó un plan de prevención de la enfermedad, niega la existencia de focos del mal.
Así lo informa hoy el diario "La Nación", que cita el caso de cuatro productores rurales en Florentino Ameghino, en el noroeste bonaerense.
"Las pezuñas lastimadas, la boca con llagas y un babeo constante son las principales manifestiones de la presencia de la fiebre aftosa en los animales", señala el diario.
El productor Raúl Giorello denunció que 13 de los 190 ejemplares holando-argentino con los que trabaja en su establecimiento padecen la enfermedad. En el caso de las explotaciones lecheras, el perjuicio es mayor, porque los vacunos dejan de producir leche, relata el matutino.
Giorello señaló que, a pesar de que ya en septiembre se detectaron los primeros casos de aftosa en la región, desde el gobierno no se tomaron medidas y sólo en enero llegaron las primeras vacunaciones.
Otro productor, que lamentó la muerte de uno de sus animales, según él por aftosa, señala que las vacas inoculadas antes del cese de la vacunación en el país, en abril de 1999, tienen anticuerpos, pero las de menos de 16 años, no.
Ambos ruralistas no descartaron que en los últimos dos años se haya producido una mutación del virus, ya que algunas vacunas aplicadas en las últimas semanas no tuvieron efecto.
En tanto, desde el gobierno argentino, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), que ayer presentó a las cuatro principales entidades rurales un plan de prevención contra la enfermedad que incluye la vacunación de cerca del 25 por ciento del rodeo vacuno nacional, negó la existencia de focos de aftosa.
El 24 de mayo de 2000 la Organización Internacional de Epizootias (OIE) había otorgado a la Argentina la calificación de país "libre de aftosa sin vacunación".
